Mediadores dicen que intervención militar en Venezuela es la peor alternativa

Mediadores dicen que intervención militar en Venezuela es la peor alternativa

La posición proviende de los mediadores Fernández, Torrijos y Rodríguez Zapatero/AFP

Caracas.- Los expresidentes de República Dominicana Leonel Fernández, del Gobierno de España José Luis Rodríguez Zapatero y de Panamá Martín Torrijos, mediadores en Venezuela, consideran que una intervención militar sería la “peor alternativa» frente a la grave crisis que enfrenta el país caribeño.

Fernández rechazó a través de Twitter, hablando en nombre de los otros dos exmandatarios, la posibilidad de una operación militar en Venezuela, informó hoy la agencia estatal venezolana AVN. “Una intervención militar, además de vulnerar los principios de la legalidad internacional, sería la peor alternativa (…).

Igualmente sería una opción sencillamente nefasta y un grave error histórico”, indicó el dominicano. Fernández reiteró que los tres mediadores apoyan “la negociación pacífica” en Venezuela y creen que un “acuerdo de convivencia democrática es solución a problemas” en el país, envuelto en una profunda crisis política y económica.

La posición de Fernández, Torrijos y Rodríguez Zapatero se produce dos días después de que el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, asegurase que su Administración no descarta una “opción militar” para hacer frente a la crisis en el país.

La presidenta de la plenipotenciaria Asamblea Nacional Constituyente (ANC), Delcy Rodríguez, les agradeció a los expresidentes el “apoyo al diálogo y a la paz en Venezuela con apego a la soberanía».

Los tres exmandatarios intentan desde 2016 sentar de manera definitiva al Gobierno de Nicolás Maduro y la coalición opositora Mesa de la Unidad Democrática (MUD) en una mesa de diálogo que establezca acuerdos para superar la crispación actual.

En esas tareas también han participado la Secretaría de la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur) y el Vaticano. Venezuela afronta un fuerte crisis económica, política y social que se ha agravado desde abril con una oleada de protestas opositoras y oficialistas en las que han muerto más de 120 personas y miles han sido detenidas.