Los Medias Rojas de Boston han tenido resultados muy cambiantes en las últimas temporadas del béisbol de las Grandes Ligas.

Fueron campeones en el 2013 y un año más tarde quedaron sotaneros en la División Este de la Liga Americana con marca de 71-91.

Para este 2015, la encomienda es volver al sendero del triunfo y para ello han traído material importante con la esperanza de poder lograrlo.

Ahí entran las contrataciones del antesalista Pablo Sandoval, quien dejó a los Gigantes de San Francisco en la agencia libre y tras ganar la corona de campeón, la que cambió por un pacto de cinco años y US$95 millones.

Sandoval viene de batear .279, con 16 jonrones y 73 remolcadas en el 2014, pero su actuación en postemporada y específicamente en la Serie Mundial, donde bateó para .429, hacen del venezolano una pieza codiciada por cualquiera.

Igualmente, los Medias Rojas agregaron al dominicano Hanley Ramírez con un contrato de US$88 millones y cuatro campañas.

Ramírez jugará en el jardín izquierdo en Boston, luego de una carrera como torpedero, con los Marlins de Miami y los Dodgers de Los Angeles.

Los Medias Rojas tienen experiencia cambiando jugadores de posición para colocarlos en el prado izquierdo del Fenway Park y si otro Ramírez, Manny, tuvo buenos resultados allí, se puede esperar algo bueno de Hanley.

Las lesiones han golpeado a Ramírez en los últimos tiempos, pero aun así se espera que se mantenga como el jugador con capacidad de batear para .300 y pegar más de 25 jonrones y remolcar cerca de 90 carreras.

Con David Ortiz entrando a su última temporada de contrato y productivo como siempre, los Medias Rojas tienen las herramientas para causar mucho daño en términos ofensivos, a pesar de la partida de Yoenis Céspedes.

Ortiz se encuentra a 34 cuadrangulares de integrarse al club de 500 y viene de jugar 142 partidos el año pasado.

Dustin Pedroia debe rebotar de un año bajo par y volver a ser tan productivo como de costumbre.

Donde se encuentran las interrogantes para los Medias Rojas de Boston es en el pitcheo abridor.

La rotación no cuenta con un abridor de primera categoría sino con varios hombres que tienen capacidad de hacer el trabajo, pero ninguna super estrella.

Adquirieron a Rick Porcello desde Detroit y tienen a Clay Buchholz, Wade Miley, Justin Masterson y Joe Kelly para completar el grupo.

El cerrador está programado para ser repetido con Koji Uehara, mientras los preparadores no cuentan con nombres sonoros.

De ahí que haya tantas interrogantes en la parte de pitcheo de este equipo y más en una complicada División Este de la Liga Americana.

Pero los Medias Rojas tienen suficientes herramientas para dar la batalla y volver a ser ganadores.