BUENOS AIRES (EFE).- El médico personal de Diego Maradona, Alfredo Cahe, admitió ayer que los centros de rehabilitación para la adicción a las drogas de Argentina no «aceptan» como paciente al ex futbolista, que aún permanece internado en una clínica de Buenos Aires a causa de un severo cuadro cardíaco y respiratorio.

De todos modos, Cahe sostuvo al canal de televisión Fox Sports que para que sea trasladado de la clínica Suizo Argentina a un centro de rehabilitación, «Diego tiene que estar de acuerdo».

Ayer, viernes, se conoció que cinco clínicas consultadas por los familiares de Maradona negaron la posibilidad de encargarse de la atención del ex capitán de la selección argentina.

El director de la clínica Suizo Argentina, Claudio Belocopit, informó el viernes de que el ex delantero es un paciente «que se quiere ir», aunque negó que haya «provocado destrozos en la habitación», tal como había trascendido.

Belocopit manifestó que el traslado del ex astro estará resuelto «en las próximas 48 horas» y aseguró que «cuidar a Diego no es tarea fácil» porque «no es cualquier paciente».

Maradona volvió a la clínica Suizo Argentina el pasado miércoles, seis días después de haberla abandonado por voluntad propia y, según fuentes de ese centro citadas por «Página/12», sufre un «síndrome agudo de abstinencia» por su adicción a la cocaína.

En su primer ingreso, el 18 de abril, el ex futbolista del Boca Juniors, el Nápoles y el Barcelona sufría un problema respiratorio, agravado por una cardiopatía.

Fuentes allegadas al ex ídolo aseguran que Maradona está de «muy mal humor» porque «no quiere ser trasladado; sólo quiere irse».

Los familiares del ex futbolista estudian qué hacer para garantizar que su salud no corra más riesgos.

En las últimas horas comenzaron a circular versiones sobre los posibles destinos de Maradona, entre los que no se descartan un centro de rehabilitación de la provincia argentina de Entre Ríos y otro de Montevideo, la capital de Uruguay.

El titular del centro de rehabilitación entrerriano de Villa Paranacito, Juan Carlos Ferreira, afirmó hoy a distintas emisoras que «si no se atiende a tiempo, Diego es hombre muerto».

Resaltó que, en caso de que Maradona quede allí internado, «tendría que bajarse del caballo y ser un obrero más que cumpla con las órdenes del capataz».

El último parte médico de Maradona, difundido anoche, señaló que permanece clínicamente «estable, con los signos vitales controlados y a la espera de que sus familiares decidan los pasos a seguir en el tratamiento».

Desde que Maradona volvió a la clínica Suizo Argentina el miércoles último, después de haberse retirado seis días antes sin el alta médica, sólo tienen acceso a la sala de cuidados intensivos en la que se encuentra su ex esposa Claudia Villafañe, sus hijas, Dalma y Giannina, sus padres y sus hermanos.

El abogado Oscar Moyano, apoderado de Maradona, dijo que «hay consenso en la familia para trasladar» al ex futbolista de la clínica Suizo Argentina.