Alertan causal inviabilidad es muy riesgosa
El Grupo Médicos por la Vida aseguró ayer que la mayoría de las complicaciones durante el embarazo ocurren por trastornos de hipertensión luego de las 20 semanas de gestación y por tanto, el procedimiento no sería un aborto, sino un desembarazo que permita a madre y a la criatura vivir.
Los especialistas señalaron que el 90% de muertes ocurre después del parto, no durante la preñez y son prevenibles con una buena consulta prenatal, nutrición, educación y atención intra y post parto.
“De modo lamentable nuestra tasa de mortalidad materna es de las más altas de América Latina, presenta este año un aumento y sectores quieren hacer entender que son producto de abortos clandestinos, esto es falso”, indica.
Expresan que estas causas fueron explicadas por el mismo director del Seguro Nacional de Salud, Mario Lama. Son por el abandono de las consultas prenatales después del covid 19, la sobrepoblación de las maternidades, y el cierre de la San Lorenzo de Los Minas, destinada a pacientes covidpositivas.
Del porcentaje relacionado con abortos, explicaron que abarca a todas las embarazadas que por alguna razón tienen pérdida espontánea, no solo por los abortos provocados o clandestinos.
El grupo recordó que el artículo 110 del Código Penal en discusión establece que la interrupción del embarazo practicado por personal especializado en establecimientos públicos o privados no es punible si, con antelación, para salvar las dos vidas son agotados todos los medios científicos y técnicos disponibles.
Malformación y violación. En cuanto a la imposibilidad de vida extrauterina explican que es riesgosa por el margen de error de los diagnósticos perinatales, esto significa que la patología puede existir y ser grave, o ligera e incluso el feto estar bien.
Recordaron que por esto la propia Sociedad Dominicana de Ginecología no aprueba esta causal.
De la causal por violación sexual, exponen que no existe una razón médica que amerite la terminación de un embarazo y alertan que esto más bien sumaría mayor agresión a la mujer ya abusada de manera física y emocional.