Médicos del Centro de Diagnóstico, Medicina Avanzada y Telemedicina (Cedimat) revisaron preventivamente la salud de 175 miembros del clero.

Gloria Muñiz, gerente de Planificación de Cedimat, aseguró que  se busca que estos servidores puedan mejorar su calidad de vida y que tengan su historia clínica registrada.

Muchos religiosos, sacedotes y monjas, no tienen seguro médico y es problable que tengan alta prevalencia de enfermedades, pero eso no se sabe.

 Los sacerdotes y diáconos fueron chequeados atendiendo a variables como la edad, el tipo de enfermedades que padecen y sus antecedentes.

Alrededor de 200 médicos, laboratoristas, radiólogos y enfermeras estuvieron recibiendo a los religiosos, quienes fueron vistos por médicos internistas, cardiólogos, urólogos y diabetólogos.

Se trata, explicó Muñiz, de una población que por lo general se dedica a servir y se olvidan de sí mismo.

La revisión formó parte de  serie de jornadas médicas que permitirá a los  religiosos revisar su estado periódicamente, sin necesidad de esperar a sufrir alguna enfermedad.

“Buscamos mejorar su calidad de vida y darles seguimiento a su actual estado”, aseguró Muñiz

El cardenal Nicolás de Jesús López Rodríguez estuvo en horas de la tarde acompañando la revisión de la salud de los miembros del clero.

Estudios.  Entre los estudios que se realizaron los curas figuran, radiografía de torax, sonografía abdominal, electrocardiograma, medicina interna, endocrinología, urología y cardiología.

Otro de los atractivo de la jornada es que a los religiosos católicos le estuvieron brindando apoyo las damas del voluntariado de Cedimat, las de la Fundación doctor Juan Manuel Taveras Rodríguez, y el Programa de Medicamentos Esenciales (PROMESE) les  otorgó paquetes con los fármacos que necesitaron.

El programa de chequeo preventivo se inició a las 6:30 de la mañana y concluyó pasadas las 4:00 de la tarde.

A los religiosos les fueron servidos desayuno, meriendas, almuerzos y otros servicios.