Ocho médicos y una enfermera mantienen ocupada desde las 7:00 de la mañana la catedral San Felipe Apóstol de Puerto Plata, donde se proclamaron en huelga de hambre indefinida en reclamo de un aumento salarial.

Los médicos son Arnulfo Suero, presidente del Colegio Médico Dominicano (CMD) filial de Puerto Plata; David Batista, José Vargas, Miguel Almonte, José Reyes, Griselda Díaz, Adalberto González, José Aníbal Rosario, y la enfermera Ramona Vásquez, quienes  dicen mantenerse firmes en su huelga.

Suero informó que la decisión de ocupar ese templo fue  asumida por ellos como filial y no del CMD.

Asimismo aseguró que en la catedral no hay más médicos porque las autoridades policiales y militares que se encuentran custodiando el lugar les impiden la entrada.

Decenas de munícipes se encuentran en los alrededores del parque central, ubicado al lado de la catedral en apoyo al reclamo de los médicos.  Entre estos, se encuentran el dirigente perredeísta, Antonio Sosa; de la Federación de Trabajadores Portuarios y Sindicatos de Cargas del Muelle de Puerto Plata, Pablo Castillo, a quienes se sumaron ex empleados de la Autoridad Portuaria en reclamo de sus prestaciones laborales.

Por su parte, el padre Francisco Hernández habló en representación del obispo Julio César Corniel Amaro, quien se encuentra fuera del país,  dijo que no tiene inconvenientes en que los médicos se queden en la catedral, pero que no acepta la entrada de otros, “porque la iglesia es un centro de adoración a Dios y no de protestas”.

Hernández informó que dio instrucciones a las autoridades allí presentes para que los forzara a salir.

Dijo que la protesta es justa, ya que cada ciudadano que ocupa un puesto y ofrece sus servicios  merece mejorías en su salario.

En ese sentido, el sacerdote sugirió al Gobierno atender el reclamo de los médicos, el cual definió como justo.

Por otro lado, la gobernadora de Puerto Plata Eridania Gibre dijo que está dispuesta a recibir los médicos en la gobernación. Sin embargo los médicos se negaron y  prefirieron permanecer en la catedral. Advirtieron, que de no ser así, no habrá negociaciones.