SAMANA.- El ministro de Medio Ambiente y Recursos Naturales, Ernesto Reyna, garantizó que pronto habrá una solución consensuada, al impasse que se ha presentado con los propietarios de los terrenos donde está ubicado el Monumento Nacional Cabo Samaná.
Reyna declaró que en cumplimiento a la Ley 64-00, el ministerio ha diseñado un Plan de Manejo del área protegida que ha sido entregado a los representantes de los campesinos, sus abogados y los legisladores de Samaná para que lo estudien.
Durante un encuentro con los propietarios de los terrenos Reyna dio garantías que el Plan de Manejo es un anteproyecto que debe ser mejorado por la comunidad conjuntamente con los técnicos de Medio Ambiente.
El Plan de Manejo plantea la zonificación del área protegida, que comprenden: una zona de desarrollo sostenible, otra de usos especiales y una de recuperación.
El proyecto busca promover el desarrollo de las distintas modalidades del turismo asociado a la naturaleza, con prácticas ambientalmente compatibles y actitudes conservacionistas. También, garantizar los aportes de los recursos naturales presentes en el área protegida a la generación de riquezas y bienestar para las comunidades locales, Samaná y el país, a través del aprovechamiento de sus potencialidades naturales.
Establece que se permitirán actividades y proyectos de desarrollo turístico innovadores, no tradicionales, capaces de compatibilizar las infraestructuras con la conservación de los recursos naturales.
Además, permitir el desarrollo de actividades artesanales, empresariales y de cualquier otra índole, para generar empleos y riquezas mediante el emprendimiento de actividades de bajo impacto ambiental que promuevan el ecoturismo y la recreación con facilidades que no degraden el ambiente y que sirvan de soporte a las actividades recreativas y de servicios.
Entre las actividades que se permitirían en el monumento se encuentran las estaciones de descanso, senderos ecológicos, miradores, viviendas ecológicas, minería regulada, energía eólica y los restaurantes ecológicos.