La secretaría de Medio Ambiente no descartó utilizar la fuerza pública para reubicar o desplazar a las seis granceras del Nizao que fueron cerradas el día 28, luego que se determinarán que algunos de sus procesos de producción violaban la resolución que prohíbe operar a menos de 150 metros del río.
Así lo afirmó el subsecretario de Suelos y Aguas, Manuel Serrano, quien informó que para el martes se tiene contemplado una inspección mayor en las granceras para determinar los pasos a seguir.
Las granceras que deberán reubicarse son Alba Sánchez, Agregados Nizao (Bisonó), Servicorte, Sucesión Guzmán, Grupo Modesto y Roberto Guzmán.
Estas granceras cerradas estaban autorizadas a operar en la zona del Nizao porque alegadamente no violaban la resolución. Sin embargo en una inspección técnica se determinó que las granceras deberán desplazar los procesamiento, sedimentación, extracción y acopio.
En la notificación de cierre se advierte que las empresas deben reiterar de forma definitiva sus maquinarias y que de no obtemperar, la secretaría podrían incautar los equipos o materiales utilizados.