POR FIOR GIL
El presidente Hipólito Mejía afirmó anoche que nunca ha buscado cargos y que tampoco se aferró a ellos, por lo que salir de la Presidencia de la República no representa ninguna ruptura en su vida y su forma de ser.

Dijo que sin lugar a dudas llegar a la Presidencia ha sido una gran experiencia, pero que «para mí el poder patológico no existe en mi mente y en mi corazón, yo estoy muy convencido de eso».

Agregó que ninguna posición a la que ha llegado la  «he anhelado, ni he buscado de una manera rabiosa nunca» y refirió que siendo muy joven fue designado director del Instituto del Tabaco en el año 1965 en el gobierno del presidente Héctor García Godoy.

Señaló que con sus 24 años, siendo tabacalero, por sangre y por formación, nunca anheló ser director del  Instituto del Tabaco y lo aceptó por la voluntad de sus superiores y de sus compañeros de trabajo.

Un año después, dijo, renunció a ese cargo y «me olvidé de esa posición, no me agarré a ese cargo ni a ese sentimiento, ni a esa especialidad que era mi vida».

Señaló que posteriormente ocupó cargos en compañías privadas y para llegar tuvo que pasar por concursos porque eran compañías transnacionales y había que demostrar cierta aptitud para eso.»Y me llegó gracias a Dios.»

Señaló que luego debió aceptar el cargo de secretario de Agricultura, para complacer al entonces presidente Antonio Guzmán, a quien siempre trató como su padre, pero que aceptar el cargo lo «pensé muchas veces, no estaba decidido ni quería ser secretario de agricultura».

El presidente Mejía, hablando en el programa «Una Vez a la Semana» que producen Ramon Colombo y Juan Taveras Hernández para la Corporación Estatal de Radio y Televisión, canal 4, recordó igualmente lo que ocurrió cuando el doctor José Francisco Peña Gómez le seleccionó para ser su compañero de boleta como vicepresidente. «Yo nunca le pedí esa posición ni me interesaba, y sabía que eso significaba posibilidades inmediatas de poder,lo acepté y fue una gran experiencia».

Afirmó que después en otro proceso el doctor Peña Gómez  seleccionó a otro candidato «y yo encantado de la vida fui a hacer lo que él quiso que yo hiciera y después de su muerte decidí aceptar la precancandidatura, sin patología, sin deseo de que tengo que llegar o me muero».

Mejía manifestó que en el desempeñó del cargo de Presidente de la República nunca  ha estado aferrado «a estas cosas materiales ni mucho menos hacer de esto algo que parte de mi vida, que sea, y lo dije antes, que sea lo que Dios quiera».

«Por eso muchos de ustedes se sorprenden, que aunque en medio de las más terribles de las adversidades yo mantengo mi posición, de estabilidad emocional, cuando tengo que decir sí, digo sí y  cuando tengo que decir no, digo no y cuando tengo que arrugar mi… la arrugo, no me ha motivado nada absolutamente nada de cambiar mi forma de ser por ser presidente», afirmó el mandatario que entregará el poder el próximo lunes al presidente electo Leonel Fernández.

Dijo una de las cosas que mas admiró de muchos presidentes europeos y  de «José Figueres, Rómulo Betancourt, es que eran presidentes de carne y hueso, caminando por las calles y eran capaz de disentir de los demás. Por eso me he sentido sin ninguna presión, gracias a Dios, esa es una realidad, yo tenía mucha gente que llamaban para preguntar cómo tu te sientes. Y yo gracias Dios, tengo mucha fe, mucha seguridad, yo conozco la gente, yo conozco el país, porque desde niño he estado en el habitad, porque mi familia materna, mis antepasados, mis abuelos y mi tatarabuelos, han participado de las contiendas bélicas y de los problemas políticos.

Indicó que por su cercanía con el presidente Guzmán logró una experiencia, no solo en la parte política y de la burocracia sino a nivel de las cosas del Estado.»Fue una experiencia buena con don Antonio así es que la presidencia era una copia de lo que yo había vivido con don Antonio Guzmán, que yo pase al ser de la intimidad tenia acceso a la contidianidad, por eso veo como las cosas mas normal, los tumba polvo, los arribistas, los cambias chaquetas, esos los conozco yo y los justifico.

Reitero que en el país existen tumbas polvo y arribistas por genética y por conveniencia » también, eso lo entiendo perfectamente y no me mortifica y se están ahí.

CORRUPCIÓN

«La corrupción yo he hablado miles de veces de eso, mis concepto son muy claros, a mi no me extraña, cuando se roban los alambres de las vías, ni cuando se roban las tapas de las cloacas, no me sorprende, porque se que, si tu les da chance a cualquiera te llevan un brazo, Yo estoy muy convencido de eso y no es aquí yo trabaje en toda América Latina y trabaje en compañías grandes y la misma estructura de pago que hay en ese tipo de estructura,» expresó.