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El candidato presidencial del Partido Revolucionario Dominicano (PRD), Hipólito Mejía, afirmó ayer que un Gobierno suyo no construirá el Metro y criticó que la actual gestión haya invertido RD$90 mil millones en ese sistema de transporte público de la capital.
Pero, ¿no es falta de gerencia hacer un maldito metro en la Capital, donde hay metidos RD$90,000 millones?. Ahí están los cuartos del 4% (para educación); no va a haber metro en la época de nosotros. Esos RD$90,000 millones que se han metido ahí, y los RD$2,500 millones al año que hay que dar en subsidio, eso habrá que seguirlo, pero habrá que bajar ese subsidio, dijo.
Al ser entrevistado por Huchi Lora en el programa El Día, por Telesistema, canal 11, Mejía manifestó que vivió una interesante experiencia en Europa, donde los metros por arriba no son rentables.
Aseguró que en el país hay recursos y sobran para cumplir con la inversión del 4% para educación.
Respecto a la elaboración de su programa de gobierno, el candidato presidencial del PRD manifestó que se está consensuando con las fuerzas vivas de la nación y aseguró que será interesante.
Mejía dijo estar decidido a hacer las cosas bien y apegado absolutamente a la ley. Con relación a la inseguridad ciudadana, el candidato presidencial del PRD lo considera como un tema inquietante, pues toda la sociedad ha sido sacudida por esa desgracia.
Mejía dijo favorecer que las instituciones del Estado sean modernizadas.
Asimismo, dijo que la justicia tendrá que jugar un papel determinante con el castigo de los que cometan actos de corrupción en la administración pública. Cree que ese tema hay que enfrentarlo con la seriedad, la decisión y el coraje que amerita.
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Narco permea
Hipólito Mejía dice que el narco ha llegado a las instancias más altas de la política dominicana, de las instituciones militares y de muchos sectores de la sociedad civil. Advierte que un gobierno suyo actuará con la firmeza y sin contemplaciones con quienes se aparten de la ética y las leyes. Dice que la crisis bancaria lo castigó en sus dos últimos años de gobierno, lo que evitó que pudiera continuar su política de vivienda.
