El presidente Hipólito Mejía inauguró ayer el Aeropuerto Internacional Joaquín Balaguer Ricardo y la avenida «Presidente Antonio Guzmán Fernández, de acceso a la terminal, construidos en el sector El Higüero, provincia Santo Domingo Norte, con una inversión de RD$1000 millones y US$32,233,691.
La nueva terminal que sustituirá el aeropuerto capitalino de Herrera, tiene una estación de aeronavegación de 4 edificios, pista de aterrizaje de 1,650 metros de longitud y 30 de ancho, con márgenes de seguridad de 7.5 metros, con un espesor de 8 pulgadas de hormigón asfáltico y puede albergar simultáneamente tres aviones de tipo 727 ó ATR-72, lo que permite clasificarlo en categoría 3C, con capacidad para operar entre 150 y 200 vuelos diarios.
La torre de control, de 35 metros de altura, está dotada de aire acondicionado central, sistema de seguridad aeronáutica y 2 plantas de emergencia de 750 kilovatios exclusivas para la torre de control y luces de pista.
Tiene un acueducto propio, avenida de 4 carriles de acceso al aeropuerto de 5.14 kilómetros y con drenaje entre otras.
El acto se inició a las 4:00 de la tarde con la llegada del presidente Mejía y los invitados especiales.
Al acto fueron invitados el señor Rafael Bello Andino, Joaquín Ricardo, la señora Renée Klang viuda Guzmán y su hija, la secretaria de Industria y Comercio, Sonia Guzmán de Hernández, el embajador de los Estados Unidos, señor Hans Hertell, el secretario de las Fuerzas Armadas, teniente general José Miguel Soto Jiménez y varios funcionarios del gobierno.
La bendición de la obra estuvo a cargo del párroco de la iglesia San Francisco de Solano, del sector Sabana Perdida, cura Luis Obispo Méndez.
Durante la actividad se dio a conocer el decreto 43-04 que designa la terminal como Aeropuerto Internacional Joaquín Balaguer Ricardo y a su avenida de acceso como Presidente Antonio Guzmán Fernández.
En el acto hablaron el señor Joaquín Ricardo, en representación de los familiares del doctor Balaguer; la secretaria de Industria y Comercio, Guzmán de Hernández, a nombre de la familia Guzmán Klang y el secretario de Obras Públicas, Miguel Vargas Maldonado.