La Gala cerró con el Concierto en La menor Op.54 de Robert Schumann, interpretado por el medallista de Oro, el joven coreano Yunchan Lim.
El músico ucraniano Dmytro Choni, la pianista rusa Anna Geniushene y el coreano Yunchan Lim, protagonizaron el recital realizado por la Fundación Sinfonía
La Gala de Ganadores del Concurso de piano Van Cliburn es ya una tradición, una herencia, un legado de esa gran dama de la Música, Margarita Copello de Rodríguez y su Fundación Sinfonía, con el apoyo del Grupo E. León Jimenes y de la Orquesta Sinfónica Nacional.
Esta VIII Gala había despertado muchas expectativas, el tiempo de espera desde la anterior se prolongó algo más, por motivos atendibles. En el lobby del Teatro Nacional, se respiraba un ambiente de emoción, alegría; poco a poco el público se desplaza hasta la Sala Carlos Piantini y cubre todo el aforo. Inicia la gran Gala.
El maestro José Antonio Molina hace su entrada y luego el ganador de Medalla de Bronce, el ucraniano Dmytro Choni, a quien ya conocíamos, pues había tocado en dos oportunidades junto a nuestra Sinfónica Nacional, para interpretar el concierto No. 3 en Do menor, Op.37, para piano y orquesta de Ludwig Van Beethoven. Desde la dramática y extensa introducción, del primer movimiento Allegro con brio, en forma de sonata, se advierte el buen ensamble orquestal. El piano entra con fuertes escalas, que le permite al pianista mostrar su virtuosismo, luego en el segundo movimiento Largo, el solista inicia con una suave melodía y presenta el tema principal, entra la orquesta y se produce un hermosodiálogo. El Rondo Allegro, es ciertamente alegre, una página lírica, con grandes requerimientos que Dmytro Choni supera con gran habilidad, recibiendo una merecida ovación. No nos equivocamos entonces, cuando le augurábamos a este joven pianista un gran porvenir.
La Gala continúa con el concierto No.1 en Si bemol menor Op.23. de Piotr Ilich Chaikovski, a cargo de la pianista rusa Anna Geniushene, ganadora de Medalla de Plata. Posiblemente este sea el concierto más popular de Chaikovski, inicia con una famosa melodía, grandiosa; el tema subsiguiente Allegro non tropoo e molto maestoso lo asume el piano, la solista, cuyas manos como ráfagas se deslizan sobre el teclado, va mostrando una técnica soberbia. En el Andantino semplice a ritmo de barcarola, se escucha una melodía con variados contra-movimientos de los grupos intrumentales y del solista. El final vibrante “Allegro con fuoco de toques rusos, permite destacar el virtuosismo de la pianista, la belleza que extrae a su instrumento y su admirable poder de comunicación. El segundo tema es un cántico triunfal, articulado por la eficiente dirección del maestro Molina. El público conmovido aplaudió largamente.
La Gala cerró con el Concierto en La menor Op.54 de Robert Schumann, interpretado por el medallista de Oro, el joven coreano Yunchan Lim, el más joven ganador del Concurso Van Cliburn. En este concierto Schumann representa los ideales del romanticismo musical.
En el primer movimiento Allegro affettuoso, domina un solo tema romántico, sentimental, de generosa sonoridad, introducido por el piano, el solo del oboe y el clarinete logra un momento emotivo, y los delicados diálogos entres solista y orquesta recrean la atmósfera poética, es el idilio, la pasión -Robert y Clara-. “Schumann es el poeta del piano” y Yunchan Lim una especie de bardo, que en una prístina interpretación aborda con sublime exquisitez los pasajes románticos, y en la bella “cadenza” evidencia su condición de virtuoso pianista.
El Intermezzo inicia con un diálogo más íntimo entre solista y orquesta, luego surge un breve y hermoso tema, expuesto por los cellos, y adornado como entre sueños por el piano, al final la orquesta retoma el tema inicial. Yunchan destaca en los pasajes íntimos hasta llegar al torbellino sonoro del “Scherzzo”, mientras nos dejamos absorber por la poética atmósfera de la obra.
En el tercer movimiento “Allegro vivace” de fuertes acentos, esencialmente romántico, Schumann expresa todo el contenido pético; surge un nuevo tema y con luminoso y alegre brillo, termina la obra. La interpretación de Yunchan Lim es brillante, sostenida en su gran técnica, en el equilibrio rítmico y en su pulsación vigorosa, capaz de arrancar a su instrumento matices sutiles. Virtuoso del piano, ha sido el más joven en ganar Medalla de Oro del Concurso Van Cliburn. Los aplausos cálidos y prolongados, con el público puesto de pie, fue el reconocimiento tributado a este joven pianista.
La Sinfónica Nacional, brindó el acompañamiento perfecto, preciso en cada momento, bajo la directriz siempre certera del maestro José Antonio Molina.
La magia que envolvió esta Gala Musical, producida por estos tres notables talentos, sin duda brotó a través de la riqueza tonal del piano Steinway & Sons, modelo D, donado al Teatro Nacional por E. León Jimenes. En mejores manos no pudo estar el estreno de este instrumento.
Las expectativas creadas fueron superadas esta histórica noche, asistimos sin duda a la Gala de tres medallistas de Oro.