Memorias de Israel

Memorias de Israel

POR INGRIS LEYBA
Con los auspicios de la Embajada de Israel en República Dominicana fue presentado en la Sala de Exposiciones del Museo de las Casas Reales, el calendario correspondiente al próximo 2007 “Memorias de Israel, visión dominicana, ilustrado con imágenes de una colección de obras creadas por ocho prominentes artistas nacionales, que visitaron este país como parte de los programas de intercambio cultural.

La exposición contentiva de las obras que ilustran el calendario, como parte de su itinerario internacional, serán presentadas próximamente en Nueva York bajo los auspicios de la institución norteamericana Alianza Dominicana Inc.

La muestra esta integrada por una selecta colección de obras producidas por los afamados artistas dominicanos Cándido Bidó, Dionisio Blanco, Nelson Ceballo, Marianela Jiménez, Guillo Pérez y Nidia Serra; incluyendo además, piezas del ceremista Thimo Pimentel y el escultor Ramón Osorio.

La actividad de presentación estuvo encabezado por el embajador de Israel, Yoav Bar-On; el pintor Cándido Bidó; Eduardo Lama, embajador de Belice; Julio César Valentín, presidente de la Cámara de Diputados; Ana Yee de Cury, directora del Museo de las Casas Reales; Abil Peralta, director de Mudic y Dionisio Blanco, coordinador general del proyecto.

En su intervención, el embajador israelí destacó el nivel artístico de las obras que componen el calendario, así como la capacidad creativa con la cual los ocho artistas absorbieron la realidad judía e israelí durante su estadía en el país.

Sostuvo que desde tiempos memorables, el encuentro con Jerusalén ha planteado a los artistas cuantiosos desafíos que dieron por resultado un extenso número de obras de arte. “La ciudad Santa ha estado infundida en una variedad numéricamente grande de motivos, desde la descripción más topográfica y realista de sus paisajes hasta en sus salmos”, agregó. 

Dijo que el fervor religioso judeo-cristiano que carecteriza tanto al pueblo dominicano como al pueblo de Israel ha hecho que el intercambio cultural surja de manera natural, para que otros países puedan compartir y apreciar las experiencias vividas en Israel.

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