Mensaje de la Editora

Mensaje de la Editora

Muchas personas han pensado por años, de generación en generación, que viven en «un valle de lágrimas», como realidad incuestionable del hecho de vivir. Y esto no es cierto. Es una verdad a medias, como muchas que abundan por el solo hecho de no seguir escuchando, o no leer la próxima línea. 

Porque sí, es posible que muchos vivan en ese «valle de lagrimas» que significan las limitaciones, la escasez, la pobreza, el dolor o la enfermedad, pero esto no es una realidad inherente al ser humano o a la vida, maravillosamente creada por un Dios Todopoderoso y Misericordioso. Es apenas esa realidad, dolorosa o plena, producto de lo que hagamos con lo que nos fue encomendado. Es pues, una decisión personal. Una lucha que escoges librar o sencillamente aceptar la derrota. De lo contrario, ¿cómo podemos explicar el hecho de miles de personas que superan toda clase de obstáculos y limitaciones, a la vista de muchos, imposibles de superar? ¿Cómo justificar a simple vista los milagros que ocurren cada vez con más frecuencia? Hay miles de historias y testimonios que sacuden el raciocinio de los más intelectuales y descubren el alma, a veces escondida, de los más sensibles.  Porque todo es posible de conseguir, todo es posible de superar, de acuerdo a la medida de su fe, a la medida de su entereza, de su decisión de reclamar lo que le corresponde como Hijo de Dios.

Hay una promesa clara de abundancia de bendiciones que se dispersan por miles de libros y versículos de la Palabra y sencillamente les invito a buscarlas y sumergirse en ellas como fuente inagotable de esperanza.  Porque la vida es un constante elegir entre una cosa u otra. Usted elige permanecer en la pobreza, o salir de ella. Elige sucumbir a sus dolores o a su enfermedad, o reclamar su sanación. Elige seguir en la mediocridad, o ser líder de su vida. Elige llorar, o elige sonreír. Y aunque les parezca una falacia o una utopía, los convido a encontrar las miles de razones para que su rostro se ilumine con una amplia sonrisa. Empiece por contar sus dones, empiece por admirar  todo lo que le rodea, desde lo más trivial hasta lo trascendental que había sencillamente obviado.  Los invito por mi parte, a deleitarse con las promesas de abundancia de bendiciones que puede encontrar en Deuteronomio 28, donde claramente expresa que «Si obedeces al Señor tu Dios, todas esas bendiciones vendrán sobre ti y te acompañarán siempre», porque sin duda alguna, «El Señor abrirá los cielos, su generoso tesoro, para derramar a su debido tiempo, la lluvia sobre la tierra, y para bendecir todo el trabajo de tus manos.»  Así que, ¡manos a la obra!. Esas bendiciones no vendrán si usted no trabaja para conseguirlas, si usted no las proclama desde el fondo de su corazón, si usted no lleva una vida limpia y pura, sin escapes de doble moral, por más justificados que parezcan a la vista de todos. Comparto con ustedes un pequeño texto con sabias elecciones, que de seguro podrán ayudarlo en la a veces olvidada rutina cotidiana, esa que conforma sin darnos cuenta, lo que es nuestra vida y que afecta en ocasiones, la claridad de nuestras creencias.

«Yo elijo vivir por mis decisiones, no por casualidades.

Yo elijo hacer lo que debo, no inventar excusas.

Yo elijo ser motivado, no manipulado.

Yo elijo la autoestima, no la autocompasión.

Yo elijo la excelencia, no la incompetencia.

Yo elijo escuchar la voz de la conciencia, no la voz de la maledicencia.

La elección es mía, y elijo rendirme

a la Voluntad Divina,porque rindiéndome

ante ella, salgo victorioso.»

Así que no se desanimen ante las realidades pesimistas que les venda la vida, su entorno o sus más allegados, y proclame siempre su poder interior, reclamando las promesas de su Padre Celestial, quien claramente expresa en Jeremías 29, 11 este categórico mensaje: «Porque Yo sé muy bien los planes que tengo para ustedes…planes de bienestar y no de calamidad, a fin de darles un futuro y una esperanza.»

En nuestra portada y entrevista central nos complace presentar a toda una leyenda de la danza mundial: Alicia Alonso, en una «danza sin límites», nos cuenta la historia de su vida, de sus esfuerzos por conseguir sus sueños y su entereza para salvar los terribles obstáculos que enfrentó.  Pero además, disfrute de nuestro contenido, lleno de novedades y reportajes de su interés, mientras les ofrecemos un recorrido por las actividades sociales más relevantes de la quincena.

Hasta la próxima y que Dios les bendiga

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