Muchas veces la experiencia nos hace recurrir
a soluciones viejas para problemas nuevos y nos
quedamos dando vueltas sin entender que la vida
es movimiento y que estamos siempre enfrentado
nuevos desafíos Paulo Coelho

Lo importante es estar en el camino*. No importa si en el trayecto se tomen atajos o por el contrario se camine lento por calles asfaltadas. Siempre el camino nos llevará a la meta. Es justamente el camino quien nos dirige a través de sus mensajes. Es el camino que nos indica una convergencia para incitarnos a tomar una decisión. Es el camino que nos regala un denso bosque donde descansar bajo un árbol frondoso, o un desierto sin asomo de vida. Es el camino que escogemos el que nos lleva al destino que elegimos. Por eso es importante darse cuenta sobre qué caminamos, hacia dónde vamos, qué nos rodea, qué cosas nos indican que estamos en el camino indicado. A veces nos agotamos buscando el camino correcto. Cambiamos de trabajo, de profesión, de pareja, de amigos, de ciudad, o de religión. Sin embargo, esos cambios también son el camino. Por eso lo importante es no dejarse llevar por el hastío, por la rutina, o por la indiferencia y en cambio, palpar cada paso, observar cada intento de vida, aprender del camino malo, de las torpezas de nuestras elecciones, y disfrutar el camino bueno, de sus exquisitos y variados regalos. Porque es en ese caminar, que descubrimos nuestras potencialidades. Cuando nos enfrentamos a obstáculos aparentemente insalvables, a decepciones, a barreras, a dolores intensos, hay una reserva de poder, de energía renovadora dentro de nosotros, que se rebela contra lo negativo. Ese yo interior que se pone al descubierto en las dificultades, puede ser tan positivo y triunfador, como decepcionante y abatido. A nosotros nos toca tomar la decisión. Y ello solo será posible cuando entendamos que el camino tiene un nombre: Jesús, quien lo expresó claramente a sus discípulos cuando dijo: Yo soy el Camino, la Verdad y la Vida, queriéndonos indicar que sólo a través de El podemos caminar hacia el Padre. Que sólo a través del amor, podemos llegar a la meta. Que sólo a través de la fe, podemos encontrar la vida. Descubrir ese poder, esa fuerza interior, esa gracia especial, es la clave para conseguir todo lo que queremos. Es tan simple como decidirnos por comenzar a expresar amor, condescendencia, comprensión, perdón, solidaridad, tolerancia, a todo y a todos los que nos rodean, aunque muchos nos interrumpan el camino de nuestra paz interior, porque son justamente éstos, quienes nos permiten luchar por nuestra verdad y reafirmar nuestra fe. Pero también debemos comenzar a expresar amor a nosotros mismos porque cuando somos auto críticos, nos damos cuenta de nuestras limitaciones, de nuestros errores, de nuestra falta de amor, y nos percatamos de la finitud de nuestra humanidad. Entonces, no hay opciones. O estás con Dios y caminas hacia El, o estás en contra y te hundes en la perdición. ¿Con cuál se queda? Yo lo invito a tomar el camino del amor, a plantearse metas alcanzables y trabajar por ellas con Jesús como aliado, y aunque en nuestra búsqueda existirán obstáculos que nos harán desanimarnos y dudar de la autenticidad de nuestras creencias, debemos ser fuertes y perseverantes porque la recompensa está al final, en la concreción de nuestros sueños y en la vida eterna, a través del camino de una vida plena. ¿Le parece imposible de conseguir? Dice Coelho que Hay dos caminos a la sabiduría: el clásico, el del sabio que se sienta, mira la montaña y comprende el sentido de la vida contemplando, y el del guerrero, a quien no le alcanza con mirar a la montaña: tiene que intentar escalarla, y su aprendizaje viene de la acción, no de la contemplación. ¿Cuál es usted? ¿Un sabio o un guerrero? En realidad no importa cuál de ellos seamos, mientras nos planteemos la búsqueda de Dios, mientras reflexionemos sobre nuestras prioridades, nuestras actitudes y las decisiones que tomaremos.

Ojalá pueda detenerse. Eso confirmará que está en el camino y que ha estado caminando. Ojalá pueda tomar decisiones. Eso lo hará crecer, aunque se equivoque. Ojalá pueda identificar claramente las prioridades en su vida y ojalá que ellas lo lleven por el camino de la plenitud a través de una técnica tan simple como asequible: la fe y confianza en tu Dios.

En nuestra entrevista central, compartimos con un personaje muy especial: Camilo Cruz, quien afirma estar en la búsqueda de la construcción del éxito. Conozca la filosofía de su vida, compartida con el público a través de sus libros y conferencias de auto ayuda y decídase a ser un triunfador. Pero además, interesantes artículos y nuestras atractivas secciones fijas, harán de esta edición una agradable fuente de inspiración.

Hasta la próxima y que Dios les bendiga,

Maribel

*Camino.- Además de su sentido primario, en el lenguaje bíblico
este término se alude simbólicamente a la conducta y voluntad divinas
y humanas, así como a sus métodos, hábitos, actitudes y propósitos.