Mensaje de la Editora

Mensaje de la Editora

El mundo de hoy está marcado por la prisa, la inmediatez y la urgencia.  Todos quieren todo, al menor tiempo posible. Los estudios académicos se vuelven cada vez más “intensivos” para terminar pronto, y las carreras se vuelven cada vez más usadas para aprovechar cualquier cosa -no importando el precio- para conseguir el mal llamado “éxito”, que en el lenguaje de hoy se interpreta como poder económico. 

Y es que nos hemos olvidado que para llegar a la cima hay que coger las escaleras, ascender paso a paso, descubriendo que en la ascensión podemos agotarnos, sólo para descubrir la fragilidad de la vida y en consecuencia, encontrar que sólo el que persevera, llega a la meta. Amar el camino y cada paso de él, es la clave. El camino de cada ser es una intensa y exquisita aventura personal. Nadie puede caminar los pasos del otro. Es algo que corresponde a cada cual. La forma de hacerlo, el rumbo y el tiempo, es igualmente individual. Lo importante es saber que cada uno de nosotros hemos sido puestos en el mundo para descubrir un camino, que es nuestra leyenda personal, sabiendo en plural que somos un conglomerado que va hacia la misma meta: la plenitud del encuentro con nuestro Padre Celestial. Así que lo que hagamos de nuestro camino es absolutamente nuestra responsabilidad. No del otro, ni del tiempo, ni de las circunstancias, ni de las calamidades, sino de nuestra propia decisión. Algunos apuestan por desafíos inmensos a corto tiempo, y muchas veces toman desvíos que lo llevan al fracaso. Esos tienen que recuperar fuerzas a través de la meditación de sus actos para retomar de nuevo el camino, esta vez conscientes de su importancia.

Dice Paulo Coelho en su libro El alquimista que “Para llegar, tendrás que seguir las señales. Dios escribió en el mundo el camino que cada uno debe seguir. Solo trata de leer lo que escribió para ti.”  Las señales pueden ser tan simples que pasen desapercibidas en tu vida. Para descubrirlas es necesario estar alerta a lo más elemental. La cotidianidad está llena de mensajes, la naturaleza habla constantemente, los amigos expresan con sus consejos o sugerencias los mensajes de tus ángeles, los niños con sus tiernas actitudes nos colman de sabiduría, aquellos desprovistos de instrucción académica nos regalan profundas reflexiones. Así que ¡mantente alerta!  Procura que tu camino sea el correcto, no necesariamente el de los demás, sino aquel que responda a tus demandas de felicidad auténtica, a tus reclamos de conocimiento verdadero y sabio, a tus necesidades espirituales, a tu paz y a tu armonía interior, porque cuando inicias el camino hacia la perfección, la aventura es fascinante. Los regalos de tus esfuerzos aparecen en el trayecto como tesoros de felicidad y satisfacción. La prosperidad se descubre y permanece contigo porque eres parte de su presencia en tu vida. La salud te acompañará porque has depositado tu confianza en Aquel que es el motor de tus fuerzas: Jesús. Y así, el bien llamado éxito te acompañará siempre, hasta el día del encuentro con tu Dios. Siempre he dicho que aquellos que viven una vida simple, sin hacer daño a nadie, persiguiendo sus sueños sin quitarle el de los demás, pueden dormir tranquilos y en paz. Al amanecer ante un nuevo día, que es un regalo, agradece a Dios sus infinitas bondades, colocándote sus sandalias de tolerancia para pisar el camino de ese día, tu ropaje de comprensión para entender que hay otros que no van en tu misma dirección, tu sombrilla de paciencia para soportar los cotidianos problemas que se presentan, tus espejuelos de sabiduría para ver en los otros que te enfrentan, a personas confundidas, y sobre todo,  tus guantes de amor para poder darles tu ternura a quien sea en cualquier circunstancia.

Y para finalizar, los dejo con esta reflexión del escritor Paulo Coelho:

“Todo comienzo es un desafío. La incertidumbre puede atemorizar, pero nuestro sueño hace que no nos detengamos, que nos pongamos en marcha hacia lo que más deseamos, aquello que nos está esperando para encontrarnos, no sabemos dónde ni cuándo,

pero sí por qué.

¿Cuándo nace un sueño? En un instante mágico.

¿Cuándo se cumple ese sueño?

En otro instante mágico.

Y entre ambos momentos, hay un camino para elegir, para recorrer, para cambiar.

Un camino de aprendizaje y crecimiento. Nadie ha dicho que emprender el camino sea fácil”. 

Con Dios a tu lado lo podrás lograr.

En nuestra portada y entrevista central, les presentamos a Rafael Blanco Canto, un visionario del turismo de nuestro país, quien creyó en sus sueños y luchó por ellos hasta lograr hacerlos realidad. Pero además, disfrute del contenido de nuestras interesantes secciones y reportajes así como del recorrido por las actividades más relevantes de la quincena.

Hasta la próxima y que Dios los bendiga.

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