Un guerrero de la luz está siempre comprometido.
Es esclavo de su sueño, y libre en sus pasos

Paulo Coelho, Manual del Guerrero de la Luz

A veces entristece constatar que el nacionalismo se ha apagado. Ese fervor por la tierra que nos vio nacer, por sus sagrados valores, por su soberanía, muchas veces está en completo abandono. Hay una apatía en parte de la población que nos hace parecer viejos, porque nuestro pasado parece demasiado lejano. Un pasado que sin embargo, debiera estar tan fresco, como la memoria de la generación que vivió la experiencia de la revolución de Abril, y el honor que todos sentimos en ese momento, de defender nuestra soberanía nacional. Pero no todo se ha perdido. Es reconfortante constatar que hay ciudadanos conscientes, convencidos de su compromiso con las futuras generaciones, alertas a la ingerencia internacional, a la posible violación de nuestros derechos, y sobre todo, prestos a sembrar la semilla del orgullo patrio a las presentes generaciones. Gente que sueña con una patria libre y soberana, como la concibió Duarte. Gente que apuesta por la paz, por la concordia, por el progreso, por la prosperidad y la abundancia en esta tierra donde aún esperamos el anhelo del canto de Juan Luis Guerra que clama ojalá que llueva café en el campo. Hay muchos adultos, profesionales, empresarios, gente de toda clase social y muchos jóvenes espontáneamente comprometidos con ese sueño y eso nos hace renovar la esperanza. Porque aunque el despropósito amenace con sustituir lo correcto, los que apuestan por lo dominicano son los más. Conforman un ejército de verdaderos guerreros de la esperanza. Jóvenes que conforman la generación de los nuevos líderes que vislumbran el cambio y la erradicación de los antivalores que nos alejan de nuestro sueño de progreso y del fin de la corrupción y la pobreza. Esos líderes que inundan nuestras calles con pancartas y promesas, ojalá que sean el puente que nos conduzca a la nueva República, a esa Quinta República que aspiramos todos los que aman la Patria y por la que que luchan miembros que cada vez más conforman la recién creada Fundación V República.

Por eso, hoy los exhorto a ser guerreros. Guerreros de la luz de la esperanza y a clamar como Coelho, en su Manual del Guerrero de la Luz:

Todos los caminos del mundo llevan hasta el corazón del guerrero:
él se zambulle sin vacilar en el río de las pasiones que siempre corre por su vida.
El guerrero sabe que es libre para elegir lo que desee:
sus decisiones son tomadas con valor, desprendimiento
y a veces- con una cierta dosis de locura.

Acepta sus pasiones y las disfruta intensamente.

Sabe que es necesario renunciar al entusiasmo de las conquistas;
ellas forman parte de la vida y alegran a todos los que en ella participan.

Pero jamás pierde de vista las cosas duraderas,
y los lazos creados con solidez a través del tiempo.

Un guerrero sabe distinguir lo que es pasajero de lo que es definitivo.

En nuestra portada y páginas centrales compartimos una interesante entrevista con el General (r) José Miguel Soto Jiménez, quien afirma con orgullo: Toda mi vida la he dedicado al ejercicio de defensa de la Nación, y quien ofrece todo un caudal de buenos augurios para el futuro de la Patria. Pero además, podrán ustedes disfrutar del rico contenido de esta edición, dedicada al Mes de la Patria, en la conmemoración de un aniversario más de nuestra Independencia nacional.

Que la disfruten y que Dios les bendiga.