DAJABON.- El mercado binacional en la frontera se desenvolvía con normalidad la mañana de hoy. Cientos de haitianos esperaban desde tempranas horas que el portón que separa su país de la República Dominicana fuera abierto para comprar y vender mercancías.

El sacerdote Regino Martínez dijo que las actividades comerciales se realizaban con absoluta normalidad, «lo que es un buen síntoma».

Debido a los constantes robos en la zona del mercado las autoridades del Ejército y de los departamentos investigativos y de Zona Franca tuvieron que disponer chequeos especiales.

La situación en la zona fronteriza se ha mantenido tensa en el último mes, luego del asesinato de la dominicana Maritza Núñez, pequeña comerciante de Hatillo Palma. Su muerte causó indignación en la zona y provocó que un grupo de dominicanos diera muerte a otros haitianos que laboraban en plantaciones agropecuarias de la zona.