La cumbre de presidentes del Mercosur reclamó ayer en Paraguay una solución pacífica para la crisis social y política en Nicaragua y pidió a Venezuela abrir canales de comunicación para la cooperación humanitaria ante el flujo migratorio.
El bloque aduanero regional destacó «la importancia de fomentar la paz, restablecer el clima de convivencia pacífica, respetar la institucionalidad democrática y garantizar el derecho de la ciudadanía a manifestarse» en Nicaragua. Enfatizó su rechazo a todo tipo de violencia, alentó «a retomar el diálogo nacional coordinado por la Conferencia Episcopal con el objetivo de consensuar una solución pacífica» y recomendó «apoyar los esfuerzos de cooperación a nivel de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos para la investigación y esclarecimiento de los hechos de violencia».
El grupo exhortó al gobierno de Nicolás Maduro a coordinar con la comunidad internacional establecimiento de canales para acceso ayuda humanitaria para paliar crisis social y migratoria y solicitó un sistema para intercambio información epidemiológica con países de región.