Por ALEIDA PLASENCIA
La actividad comercial  en la avenida Mella está “prácticamente nula”. Las ventas en la mayoría de los negocios se han venido reduciendo en los dos últimos años, como consecuencia de una serie de factores que merman el atractivo de la zona para los visitantes.

Entre las causas que estarían contribuyendo a la depreciación de esta  área como demarcación comercial tradicional, comerciantes consultados citaron el deterioro físico  de la calle,  escasez de parqueos, falta de iluminación y cierre temporal del tránsito en la avenida Duarte, por la construcción del Barrio Chino. 

Afectan también la actividad comercial de esta arteria el deterioro físico que sufren zonas aledañas, como consecuencia de la “lenta remodelación” de la avenida Duarte, así como la fuerte competencia de las plazas comerciales modernas, donde los clientes gozan de una serie de atractivos que en la avenida Mella están ausentes, tales como altos niveles de vigilancia policial o de guardias de seguridad privada, según comerciantes entrevistados.

Las opiniones  de comerciantes formales e informales son coincidentes  en el temor de que sus negocios quiebren en el corto y mediano plazo.

Durante un recorrido por la zona, reporteros de este diario observaron que en  la avenida Mella hay numerosos letreros de “Se vende”, colocados en paredes de negocios cerrados.

 Esta situación es más acentuada en la cercanía de la zona donde se construye el Barrio Chino, en  la avenida Duarte, así como  el área hacia la calle Juan Saltitopa.

El presidente de la Asociación de Comerciantes del Mercado Modelo, Pablo Jiménez, estima que las ventas en la avenida Mella empezaron a disminuir de manera coniderable  desde el 2004, para una reducción de alrededor de un 15% anual.

Ha incidido en ello “la proliferación de negocios informales en áreas cercanas, instalados inclusos en escaleras de edificios, el cambio experimentado en el tipo de turistas que nos visita y la competencia que generan las plazas comerciales”.

Considera que los turistas que están visitando esta arteria comercial gastan poco, no traen más de cien dólares en los bolsillos, viene y miran, toman agua o una Coca Cola y se marchan, dijo Jiménez.

Para Juan Medrano, empleado de la tienda Distribuidora de Cistalería, la situación para el comercio de la avenida Mella está muy difícil.  Las  ventas son escasas, y “hay negocios aquí casi quebrados y muchos comerciantes tienen en venta sus locales”, dijo.

“Aquí hay días en que se puede jugar pelota en la calle”, sostuvo el relojero Norberto Rodríguez, en referencia a la ausencia de clientes.

Luis Rodríguez, gerente de Centro Mella, atribuye el desgaste de la imagen de la avenida Mella como arteria comercial tradicional, entre otros factores, a la falta de remodelación y modernización de la zona, lo que, según él, incide para que los clientes opten por irse a las plazas comerciales.

Instó a las autoridades gubernamentales, y específicamente el Ayuntamiento del Distrito Nacional, a que tomen acciones dirigidas a “adecentar” el área comercial de la avenida Mella. En ese sentido, considera que en los alrededores del Mercado Modelo se requiere énfasis en la limpieza, incluida la recogida de basura.

Según opinión del administrador de la tienda Centro Hogar, Miguel Pujols,  la actividad comercial de la avenida Mella se caracteriza por el cierre de negocios, locales en venta, deterioro físico de áreas aledañas. “Las ventas están prácticamente nulas”.