Mesa urge RD y Haití bajen tono discurso

Mesa urge RD y Haití bajen tono discurso

William Charpantier, coordinador de la Mesa Nacional Para las Migraciones y Refugiados en RD.

Crisis haitiana. Situación de cuidado.

El tono de los discursos entre República Dominicana y Haití debe ser fundamentado en la búsqueda de soluciones armoniosas mediante los canales diplomáticos, no en acusaciones ni contra acusaciones y medidas migratorias contra los inmigrantes haitianos en este lado de la isla.


La consideración es de la Mesa Nacional para las Migraciones y Refugiados en República Dominicana (MENAMIRD) que respalda el planteamiento del director del Instituto Nacional de Migración, Wilfredo Lozano, en cuanto a que la crisis actual es la más delicada en Haití, luego de la salida de Duvalier y el golpe militar contra Jean Bertránd Aristide. De igual modo, en que a un grupo de poderoso de la vecina nación no les interesa la solución de crisis en Haití y torpedea cualquier intención de diálogo con República Dominicana.


William Charpantier, coordinador de la Menamird, cree que tanto RD como Haití deben moderar el tono de sus discursos para facilitar una salida a la situación de inestabilidad al otro lado de la frontera.


Estima que a pesar de la crisis haitiana la cantidad de inmigrantes que cruzan la frontera no es la que se esperaba, lo que significa que el problema no son estas personas que tratan de seguir viviendo en cualquier lugar del mundo.
“Entendemos la situación del Gobierno dominicano, pero en ocasiones el lenguaje que se utiliza alborota cualquier tipo de relación que se pueda tener a través del buen lenguaje diplomático, porque además, no se está en una guerra entre ambas naciones ”, sostiene.


Señala que la cantidad de militares en la frontera, más de 11 mil, no es sostenible durante mucho tiempo, además de que existe una relación natural entre dominicanos y haitianos en término comercial y laboral que está por encima de cualquier situación.

Indica que miles de inmigrantes haitianos se encuentran en labores agrícolas, en la construcción y otros servicios, que aportan a la economía dominicana, pero al mismo tiempo ayudan a sus compatriotas al otro lado de la frontera, por lo que rechaza que constituyan una carga para el Estado.

Ambos pueblos se necesitan

Un despropósito
William Charpantier expone que tanto uno como otros se necesitan mutuamente, por lo que la mejor medida sería la que armonice las relaciones entre ambos pueblos. “Haití es el segundo socio comercial de República Dominicana, todo eso hay que cuidarlo, independientemente de lo que el Gobierno haga, hay un lenguaje que hay

que moderar, porque hay agendas que son comunes”, subraya. Precisa que Haití es un Estado. Define como un despropósito el anuncio del presidente Luis Abinader de suspender el programa de visas a los estudiantes haitianos, ya que estos aportan más de US$240 millones al año y no constituyen una carga para el Estado dominicano.