POR MANUEL JIMÉNEZ
El administrador de la Corporación Dominicana de Empresas Eléctricas Estatales (CEDEEE), Radhamés Segura, dijo ayer que la meta del presente gobierno es conjurar los apagones y que un primer paso en este sentido es reducir el déficit corriente de unos US$27 millones mensuales que afrontan las empresas distribuidoras de energía.

Segura dijo que al tiempo que se mejora el servicio de electricidad, la meta esencial debe ser mejorar los cobros de la facturación, que es la causa central del déficit de caja que han estado acumulando las empresas de distribución en los últimos meses.

“No se le puede pedir a la gente que pague con un servicio malo”, reconoció el funcionario al ser consultado por periodistas en el Palacio Nacional.

Estimó que los usuarios deben saldar sus deudas con las distribuidoras, a fin de que esas empresas puedan mejorar su liquidez y se concentren a cubrir en parte ese déficit corriente que arrastran, pagando de esta manera a tiempo a los generadores.

Dijo que las nuevas autoridades han estado en conversaciones con representantes de las empresas generadoras y de distribución, y anunció que para el 21 de este mes AES está esperando un embarque de gas para poner a operar su planta de Andrés, Boca Chica.

Con este cargamento entraran en operación una planta de 300 megavatios y las dos turbinas de gas de Los Mina, con lo que se espera que se estabilice el servicio, dijo.

Dijo que los ejecutivos de AES han explicado que con la llegada de este buque tendrán gas para operar ambas plantas en los próximos 50 días.

El funcionario dijo que ahora debe buscarse la manera de pagar a estas generadoras para que al término de esos 50 días puedan contar con los recursos para importar combustible.

“Esto sería como irse enganchando dentro del engranaje y revertir la situación que tenemos”, dijo Segura. Manifestó que en los hechos se nota que esa situación ha ido cambiando, aunque reconoció que desconoce “a qué velocidad”.

Indicó que algo importante es que se está generando un clima de confianza y espera que esto motive a los usuarios para que salden al final de cada mes su factura de servicio.

Segura dijo que en la actualidad las distribuidoras de energía arrastran un déficit de caja de US$27 millones mensuales y que el reto es frenar ese déficit para que no suba.

“Hay que procurar que ese déficit vaya bajando y en la medida que se va mejorando el suministro de electricidad, la cobranza y el clima de estabilidad, entonces ese déficit va ir bajando hasta que las distribuidoras se puedan colocar en un punto de equilibrio”, dijo.

Segura aclaró que no quiere decir que se haya pagando las deudas acumuladas con las empresas generadoras y distribuidoras. Explicó, sin embargo, que si se elimina el déficit de caja, pues “evidentemente habrá dinero con qué cumplir con las obligaciones corrientes y las plantas no se apaguen por falta de combustible”.

Aclaró que todo esto será parte de un proceso, pero insistió en que la población puede estar seguro de que este gobierno “va a resolver definitivamente el problema eléctrico en la República Dominicana”.