Metro podría llegar hasta San Isidro

<P>Metro podría llegar hasta San Isidro</P>

El director de la Oficina para el Reordenamiento del Transporte, ingeniero Diandino Peña, informó ayer  que el Gobierno estudia la posibilidad de extender la segunda línea del Metro  de Santo Domingo hasta San Isidro. Peña dijo que sectores civiles y militares de Santo Domingo Este solicitan la continuación del proyecto. Se había dicho inicialmente que esta línea cubriría la ruta San Luis-Los Alcarrizos,  pero luego fue limitada, por razones de costos, al tramo Máximo Gómez-Los Alcarrizos.

El director de la Oficina para el Reordenamiento del Transporte (Opret), Diandino Peña, informó ayer  que el Gobierno estudia la posibilidad de extender la segunda línea del Metro de Santo Domingo hasta San Isidro.

Peña dijo que sectores civiles y militares de Santo Domingo Este solicitan la continuación del proyecto.

Explicó que los estudios que se hacen en la avenida Expreso V Centenario buscan conocer el impacto que tendría en la gente, en el cableado los sistemas sanitarios y pluviales, la continuación del Metro y aclaró que en lo que resta de mandato es imposible terminar por completo la obra.

Sin embargo, Peña visitó ayer al presidente Leonel Fernández  en compañía del empresario Joan Giacinti, quien representa a inversionistas franceses interesados en financiar la segunda línea del Metro.

Aseguró que los compromisos asumidos con el Gobierno y empresarios franceses siguen vigentes, pero que habrá que esperar que pase el presente período electoral para concretar algunos aspectos. 

El funcionario dijo que la motivación para extender la segunda línea es por solicitud de la gente y los resultados de la primera línea, “que ya moviliza   100,000 pasajeros por día”.

“Lo que nosotros tratamos y hacemos el esfuerzo es porque lo que hagamos obligue al próximo Gobierno a darle continuidad”.

Dijo que el principal objetivo es terminar la primera fase de la segunda línea que va desde Los Alcarrizos a la Máximo Gómez, y que dentro de diez o quince días concluirá el proceso de licitación para determinar si va o no con la participación del sector privado.

Se preparan.  Organizaciones sociales y de comerciantes de la zona Norte  coordinan acciones de protesta por la defensa del territorio y el espacio ante la decisión de la Opret  de continuar con la segunda línea del Metro sin tomarlos en cuenta.

El Comité para la Defensa de los Derechos Barriales (Copadeba) y el Comité del Distrito Nacional del Foro Ciudadano, advirtieron ayer que no inician ahora la jornada para evitar que se utilice con fines electorales.

Desde ayer, máquinas perforan en medio de la avenida Padre Castellanos para el estudio de suelo, aparte de las grandes excavaciones que se realizan en la avenida Quinto Centenario, que ya se llevó una buena parte del patio de la escuela República Dominicana, donde se cree iría una de las paradas del Metro.

El sábado 24 de abril llegó al país una máquina tuneladora considerada una de las más modernas del mundo, con lo que los constructores del proyecto tratan de avanzar el túnel lo más rápido posible.

Patricia Gómez, coordinadora de Copadeba y ahora además del Foro Ciudadano, consideró que “la falsedad”  caracteriza a los funcionarios de la Opret que anuncian una cosa y  hacen lo contrario.

Caos en tránsito

La construcción de la segunda línea del Metro de  Santo Domingo con la ejecución de los  elevados del Corredor Duarte, principalmente los de la avenida John F. Kennedy, han ocasionado congestionamiento en el tránsito en esa vía, en momentos en que marchan a ritmo acelerado tanto la conclusión de los distribuidores de tráfico como los del  ferrocarril.

Ayer, precisamente, se incrementaron los tapones y los inconvenientes en el tránsito en las avenidas De los Próceres, Luperón y  Padre Castellanos. En esta última vía se iniciaron ayer los estudios de suelos, en tanto que en el Quinto Centenario se trabaja en el proceso de excavaciones y se ha dispuesto el cierre de un carril.

En el tramo comprendido entre las avenidas Winston Churchill y Dotor Defillo diriamente se origina un “pandemonio” en el cual se confunden decenas de vehículos pesados en plena labor de perforaciones y movimiento de tierra, con transeúntes, que pocas veces utilizan el puente peatonal, además del tránsito de automóviles privados, del transporte público y autobuses.

Igual situación se observaba ayer en los alrededores de la intersección de John F. Kenndy y Luperón, debido a que han cerrrado el tránsito en un tramo para facilitar los trabajos de la segunda línea del Metro. A pesar de la ayuda de los agentes de Amet   y de  letreros que advierten el desvío hay un tapón casi permanente debajo del puente. Los trabajos de los elevados en la  Nuñez de Cáceres y  Defillo avanzan  en espacio cerrado. Los tapones son largos.

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