MEXICO (AP). México ha entrado en contacto con algunos gobiernos latinoamericanos para buscar que en una sola voz manifiesten su rechazo a una ley sobre inmigración aprobada por la cámara de representantes de Estados Unidos, que considera la construcción de un muro fronterizo.
El canciller Luis Ernesto Derbez también dijo ayer, miércoles, que el 29 de diciembre tiene prevista una reunión en Washington con el subsecretario de estado estadounidense, Robert Zoellick, a quien le planteará la posición de México contra el avance de la recién aprobada ley que sólo considera cuestiones de seguridad como medio para frenar la migración ilegal.
En rueda de prensa, Derbez explicó que México aprovechó la pasada reunión energética regional en el balneario turístico de Cancún para plantear a los gobiernos de Centroamérica, Colombia y República Dominicana la posibilidad de tener una sola posición sobre la normativa de la cámara baja estadounidense.
Señaló que a esos gobiernos se les planteó la posibilidad de «que los países que nos vemos afectados particularmente en nuestra región americana, deberíamos de tener una voz de impulso común.
Añadió que si se logra un acuerdo, los países deberían proveer información en conjunto a diversos sectores en Estados Unidos para que «se entienda que hay migrantes salvadoreños, guatemaltecos, hondureños, brasileños; que hay una gran cantidad de personas de nacionalidades distintas a la mexicana que contribuyen a esa sociedad.
El planteamiento, dijo, «es que trabajemos en conjunto si así les interesa, aunque señaló que aún no se ha establecido un acuerdo definitivo. En Guatemala, el presidente Oscar Berger ya criticó el propósito de Estados Unidos de construir un muro en la frontera con México, en sintonía con declaraciones de su colega Vicente Fox.
México ha diseñado una estrategia de cabildeo ante sectores estadounidenses, incluido el senado, sobre el impacto negativo que tendría la aprobación final de una ley que sólo se enfoque en cuestiones de seguridad y no considere un programa de empleo temporal y la regulación de los indocumentados que ya están en Estados Unidos. Como parte de esa estrategia, el gobierno contrató por un año a la firma de relaciones públicas Allyn & Company para ayudar a mejorar la imagen del país y promover la causa contra las barreras fronterizas.
Derbez dijo que también han mantenido contactos positivos con la conferencia episcopal estadounidense y que espera reunirse con el obispo católico en Washington durante su visita a Estados Unidos la próxima semana. El canciller sostuvo que el episcopado estadounidense envió una carta a los miembros de la cámara de representantes el 14 de diciembre en la que les pidió no aprobar la propuesta migratoria.
Sobre la reunión con el subsecretario de estado estadounidense, Derbez dijo que ya había sido pactada previamente a la aprobación de esta ley, pero que aprovechará para dejarle en claro «nuestra preocupación por el tipo de legislación que en este momento se está considerando en el congreso americano.