AFP. NATAL, Brasil. México derrotó 1-0 a Camerún ayer en su debut mundialista en el estadio Arena das Dunas de Natal (noreste) con un gol de Oribe Peralta, que deja al Tricolor al frente del complicado Grupo A junto a Brasil.

El único gol lo anotó Peralta, delantero del América, en el minuto 61 en un choque disputado bajo un inesperado diluvio caído sobre la calurosa Natal.

El triunfo final atemperó los caldeados ánimos de México con el arbitraje del colombiano Wilmar Roldán, que anuló de forma muy dudosa dos goles a Giovani dos Santos en la primera mitad. «El arbitraje nos sacó dos goles, pero llegamos con tres puntos y el ánimo a tope. Pudimos irnos con un marcador más amplio, vimos la repetición, pero el equipo no se desesperó», dijo el seleccionador mexicano Miguel Herrera. México tuvo el control del balón y buscó siempre las internadas por las bandas de sus carrileros, en especial a través del muy activo Héctor Herrera.

El volante del Oporto lanzó al 11 un centro al área que remató de zurda a la red Dos Santos pero el árbitro anuló el gol por un dudoso fuera de juego. «Me sorprendió ver cómo superábamos tan fácil al rival, no tuvieron explosión porque estuvieron pendientes de nosotros. El manejo de la pelota fue bueno y superamos las expectativas», añadió el técnico.

Camerún, mientras, esperaba la oportunidad de lanzar a su figura Samuel Eto’o al contraataque y trataba de sacar partido de su superioridad aérea. Cada córner en el área azteca llevaba serio peligro al arco de Guillermo Ochoa.

Eto’o tuvo su gran oportunidad en el 21 cuando remató con la izquierda al poste un servicio del lateral Ekotto. Los menudos Herrera y José Vázquez sufrían en el centro de la cancha ante la superioridad física de Alex Song y Stephane Mbia. Pero México también tuvo sus oportunidades por alto, con Rafa Márquez.