MEXICO (AP).- El presidente Vicente Fox pidió al Congreso eliminar un impuesto de 20% a las bebidas que usan edulcorantes distintos al azúcar de caña mexicana, dos meses después de que la Organización Mundial de Comercio (OMC) resolvió que México violó normas de comercio internacional en una disputa que Estados Unidos llevó ante el organismo.

En una iniciativa de decreto entregada el martes a la Comisión Permanente (órgano que sesiona cuando las cámaras de Diputados y Senadores se encuentran en receso), Fox dijo que si no se deroga el impuesto Estados Unidos podría adoptar «represalias comerciales’’ en contra de México.

La Comisión Permanente turnó la iniciativa a comisiones de la cámara baja para su análisis.  A raíz de una queja de Estados Unidos, la OMC resolvió a principios de marzo pasado que México violó las normas del comercio mundial al imponer el impuesto a bebidas que utilicen endulzantes distintos a los de caña de azúcar, como el jarabe de maíz de alta fructosa estadounidense.

El impuesto está en vigor desde el 1 de enero del 2002.

«El cumplimiento de México con sus obligaciones ante la OMC también será un elemento importante para la defensa de otros litigios internacionales’’, señaló el mandatario en el texto.

«De no hacerlo, se estaría dando pie a que Estados Unidos de América suspendiera concesiones a productos de interés para México, es decir, dicho país podrá adoptar legalmente las comúnmente llamadas represalias comerciales’’, añadió.

El gobierno ha dicho que el fallo de la OMC no resuelve una disputa que mantiene con su vecino del norte para que permita un acceso amplio de azúcar mexicana.

México impuso el gravamen como una medida de presión para que Estados Unidos abriera más su frontera al ingreso de azúcar mexicana.

El gobierno mexicano ha considerado que Estados Unidos no ha cumplido con su obligación de permitir la entrada de una cuota amplia de azúcar mexicana, conforme al Tratado de Libre Comercio de América del Norte.  En el segundo semestre de 2005, Estados Unidos otorgó a México una cuota de 250.000 toneladas de azúcar, el mayor volumen de ingreso concedido al endulzante mexicano desde la entrada en vigor del Tratado en 1994.

En febrero pasado, Estados Unidos otorgó otra cuota por cerca 60.000 toneladas de azúcar adicionales. México también otorgó una cuota libre de arancel de 250.000 toneladas de fructosa estadounidense.

El gobierno ha comentado que si bien esas cuotas permiten avanzar en la solución del conflicto, aún es insuficiente.