Tres días después de la fuga del capo de las drogas más buscado de México, Joaquín “El Chapo” Guzmán, las autoridades continúan su búsqueda con un fuerte operativo de seguridad, mientras los expertos advierten de que la violencia entre grupos de narcotraficantes podría repuntar en los próximos días.

La fiscalía mexicana publicó ayer en el Diario Oficial de la Federación las condiciones de la recompensa de 60 millones de pesos mexicanos (US 3.8 millones) a quien aporte pistas para capturar al narcotraficante, quien se fugó de una prisión de máxima seguridad el sábado. Según la fiscalía, la recompensa se dará a “quien o quienes proporcionen información útil, veraz y oportuna que auxilie a la localización, detención o aprehensión” del narcotraficante.

En la última rueda de prensa celebrada ayer, la fiscal general Arely Gómez informó sobre esta recompensa, que es la más alta ofrecida por un delincuente en México, motivada también porque esta fue su segunda fuga. “El Chapo” huyó el sábado del penal de máxima seguridad de Altiplano I, en Almoloya de Juárez, en el central estado de México, tras burlar fuertes medidas de seguridad, a través de un túnel que daba a una casa ubicada a 1,5 kilómetros de la prisión. El Gobierno mexicano implementó un operativo por tierra, mar y aire para encontrar al narcotraficante.