Mezcla de culturas

Mezcla de culturas

POR CLARA SILVESTRE
Los objetos artesanales se lucen como grandes protagonistas de lo que se identifica como estilo étnico. Se trata de un retorno al ayer que refresca esa fusión de culturas de la cual se considera a África como una gran inspiradora, por lo rico de su artesanía y lo espontáneo y diverso de su cultura.

El arquitecto Iván Balcácer se refiere a una tendencia que hace uso de elementos de culturas de vasta tradición, que fue introducida con la finalidad de crear exotismo en la decoración de interiores.

Asegura que la línea étnica mantiene su vigencia al mezclarse con otras tendencias como la minimalista que introduce la pasividad de los objetos japoneses, sonajeros, fuentes de agua, muebles de fibra, alfombras de yute, sisal y otros elementos de las culturas china, tailandesa y filipina, entre otras.

Del mismo modo, explicó que se emplean telas vaporosas, sedas crudas, algodones blancos, combinados con cojines terminados con pedrerías, todo con la intención de crear una ambientación rica en elementos exóticos y sensuales.

Destacó que el nuevo estilo étnico puede aplicar las texturas, olvidándose del color, haciendo uso de maderas, oscuras, muebles de fibras, accesorios de bambú, pedrería, bronce, plata y telas en tonos crema y blanco.

Balcácer agregó que también se ha combinado con elementos “retro” de los años 70, donde el color es fundamental, aunque las combinaciones son casi siempre monocromáticas: naranjas con blanco, combinando muebles de inspiración contemporánea con alfombras de pelos de animal, telas con estampados orientales o neoafricanos , así como lámparas de papel de arroz. 

Cuando Iván Balcácer afirma que podría decirse que lo étnico llegó para quedarse en la moda de la decoración, explica que es en la década de 1960 que puede hablarse del surgimiento de una tendencia verdaderamente étnica, al ser adoptada como moda las vestimentas y objetos de las culturas orientales por el movimiento “hippie”.

Así fue que las túnicas, calzados, sombreros, accesorios de vestir seguidos por telas, muebles, artesanías y objetos de uso cotidiano procedentes de la India, China, Tailandia, Japón y más tarde África, fueron integrados a la llamada cultura joven, indicó.

“Lo étnico se convirtió en objeto de protesta y lucha contra la sociedad industrializada, sus estamentos de desigualdad social y todo lo que significara tecnología. Esta tendencia fue abandonada durante la década de 1980, luego bajo el despertar de los grupos ecologistas, en la década siguiente, resurgieron nuevos brotes de líneas étnicas”, agregó.

Al hacer una revisión histórica sobre esta tendencia, Balcácer señaló que el temor de destruir las reservas naturales del planeta, la proliferación de áreas contaminadas y la penetración del mundo occidental en las culturas tradicionales, hizo pensar que había que rescatar el planeta y con él las civilizaciones en riesgo de desaparecer.

“Fue así que vimos desaparecer en nuestros hogares las telas estampadas con manchas de animales salvajes, los accesorios con imágenes de monos, elefantes, jirafas, palmeras, como una forma de recordar la mítica África. Luego llegaron las telas de seda o imitación de ésta, estampados del Lejano Oriente, estantes en forma de pagoda, lámparas con base de vasijas de porcelana, todo en rememoración de la antigua China”, informó.

Iván Balcácer agregó que más recientemente reaparecieron los estampados tipo Batik, alfombras tipo persa, muebles con terminación de patas torneadas, tallas, emulando los interiores mogules, del norte de la India y el cercano Oriente.

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