Por ALEIDA PLASENCIA
Con una inversión de 600 pesos, utilizando en el día un cuarto de dormir como fábrica, encima de una cañada, tres hermanos comenzaron hace 21 años una microindustria de correas de vestir. La han convertido en “una verdadera zona franca”, en centro del barrio Simón Bolívar, que ofrece más de 60 empleos directos.

Los tres hermanos, Miguel Ángel, Narciso y Ambriorix Vásquez, fundadores de la empresa “Cinturón Vásquez”, más adelante se unieron estratégicamente a otros jóvenes emprendedores, y estos últimos, a su vez, crearon otras cinco industrias de correas de vestir en el mismo vecindario.

Sustentadas en una alianza estratégica, las seis microindustrias no compiten entre ellas, están unidas para compartir tecnología, maquinarias, comprar grandes cantidades de materias primas de forma conjunta, reduciendo así los costos de producción y mercadeo.

Estas empresas se identifican bajo la marca GSB, que significa Grupo Simón Bolívar, y aglutina las seis industrias en referencia.

Las seis empresas han diversificado los productos. Actualmente además de correas de diversos tipos, tamaños y colores, fabrican carteras, mochilas “bultos” de viaje y de múltiples usos. Con ello, contribuyen en gran medida, en el abastecimiento de numerosos negocios de Santo Domingo e interior del país.

Específicamente, la empresa “Cinturón Vásquez”, inició recientemente la elaboración de hebillas. Con ello se propone reducir los costos de producción, ahorrarle divisas al país, y aumentar la empleomanía. Como consecuencia de la introducción de la fabricación de hebillas, la empresa tuvo que contratar tres nuevos empleados adicionales.

Actualmente, Miguel Ángel, Narciso y Ambriorix gestionan un financiamiento de un millón de pesos, a través del Programa para el Desarrollo de la Pequeña y Mediana Empresa (PROMIPYME), para hacer una ampliación donde instalarán las operaciones de fabricación de hebillas. Con esta ampliación, explicaron, la empresa podrá ofrecer 15 empleos adicionales.

La empresa “Cinturón Vásquez”, cuya mano de obra en sus inicios se limitaba a los hermanos fundadores, ofrece empleos a 24 jóvenes, de manera directa, “con lo que contribuimos a combatir la delincuencia”, pues aportamos puestos de trabajo para mantener la gente ocupada y damos ejemplo de que con el trabajo se puede comprar casa decente, yipetas y poseer capital”, dijo Miguel Ángel Vásquez durante una conversación con esta reportera.

El resto de las empresas del grupo, o sea, las otras cinco industrias, general 36 empleos directos, para un total de 60 entre todas, dijeron.

En principio, con una sola máquina trabajaban las seis empresas, turnándosela cada día. Luego el “Grupo Simón Bolívar” adquirió otra máquina (para la operación de las fábricas de los diversos productos) y ahora hay dos para turnárselas entre las seis industrias, dijeron.

Con relación al financiamiento, informaron que en principio tenían que acudir a préstamos caros en la banca formal. Luego de surgir el PROMIPYME, ese problema quedó resuelto, “nos presta a tasas de interés asequibles” dijo Miguel Ángel.

Dijeron que Mayra Jiménez, directora del PROMIPYME, visita a menudo estas empresas, con el propósito de identificar necesidades y tratar de buscar solución a sus problemas, a través de apoyo en financiamiento y asesoría técnica.

El Grupo Simón Bolívar cuenta también con asesoría de Fernando Félix, quien anteriormente trabajó en proyectos similares para las Naciones Unidas, entidad que también ha colaborado con estas empresas.

Miguel Ángel, Narciso y Ambriorix explicaron que aunque sus empresas están en un lugar que muchos consideran de gran peligro, por el auge de la delincuencia, ellos no temen, porque como empresarios son respetados y queridos por los moradores del barrio Simón Bolívar. Además, “servimos de ejemplo de trabajo y gente de bien”, dijo Narciso.

Según testimonios de jóvenes de la zona, los empresarios de estas industrias son muy colaboradores con los moradores de esta zona, contribuyendo en acciones comunitarias con el saneamiento de cañadas y con necesidades personales, como por ejemplo ayudas económicas a familias afectadas por la muerte de un ser querido.

Dan becas

También dan becas de estudios universitarios a jóvenes meritorios como premio a la excelencia en el trabajo. Actualmente hay cuatro estudiantes universitarios becados por ellos.

Según explicaron, estas empresas dan facilidades de estudio a los jóvenes que trabajan en ellas, en término de horarios.

Los hermanos Miguel Ángel, Narciso y Ambriorix Vásquez dice que tienen grandes expectativas con el nuevo proyecto de fabricación de hebillas. Se mantienen firme, sostuvieron, en la decisión de fortalecer la tecnificación a fin de mejorar cada día la calidad.