POR MARIO MÉNDEZ
Representantes del sector sindical advirtieron que la inmigración haitiana desordenada está creando serios problemas en el mercado laboral, al extremo de que aunque la ley establece que por lo menos el 80 por ciento de los trabajadores en cada sector de la economía deben ser dominicanos y el restante 20 por ciento extranjeros, hay sectores en que esa relación se ha invertido. Informaron que se ha creado un comité en que participan la Dirección General de Migración y cuatro representantes del sector sindical.

Este comité tiene el propósito de delinear políticas que conduzcan a una solución del problema.

Los planteamientos fueron hechos en el Encuentro Económico del periódico Hoy por el secretario general de la Confederación Autónoma Sindical Clasista (CASC), Gabriel del Río; el secretario adjunto, Elpidio Antonio Santos, y José Luis León, secretario de quejas y conflictos.

Los directivos de la CASC consideraron que el comité creado, que hasta ahora es bipartita, debe también incluir una representación de los empresarios, como sector empleador.

Dijeron que actualmente en el país hay más de un millón de haitianos y que muchos de ellos están ocupando los trabajos que han sido abandonados por dominicanos.

Señalaron que la presencia de mano de obra haitiana es predominante en el sector agrícola, en la construcción y en los renglones de jardinería y mantenimiento en los grandes resorts.

Explicaron que los problemas que se están presentando en el mercado laboral se producen por la ausencia de una política que permita ordenar la inmigración haitiana.

En lo que respecta particularmente al sector construcción, afirmaron que la masiva presencia de mano de obra haitiana ha dado lugar a que se rompa la institucionalidad en el sector y a que no se cumplan las tarifas establecidas por el Comité Nacional de Salarios.

Explicaron que esto ocurre porque el ingeniero que tiene a cargo una construcción prefiere utilizar la mano de obra ociosa ilegal porque de esta manera puede desconocer las tarifas establecidas por el Comité Nacional de Salarios.

Afirmó que en este sector también se dan subcontratos a ingenieros que poner a trabajar a haitianos en condiciones casi de esclavitud, y si éstos se resisten los hacen repatriar

sin pagarles nada y sin darles siquiera oportunidad a que recojan sus «cachivache».

Afirmaron que el problema no se resuelve con sólo decir: vamos a repatriar a los haitianos, sino que hay que definir políticas para ordenar la inmigración. Resaltaron la importancia que tiene la búsqueda de una solución a este problema.

Confiaron en que el país pueda definir política de cómo encauzar todo el problema de la inmigración.

En el encuentro económico del periódico Hoy, los directivos de la CASC también afirmaron que están opuestos que después de ocho posposiciones, se disponga una nueva prórroga para el inicio del plan básico de salud, que deberá comenzar en octubre del presente año.

También abogaron porque se creen las condiciones para que las empresas dominicanas puedan competir en el marco del Acuerdo de Libre Comercio entre los Estados Unidos, Centroamérica y la República Dominicana, y el país no se convierta en un almacén de importaciones, como resultado de la puesta en vigencia del DR-Cafta.

Además, los dirigentes de la CASC informaron sobre las actividades que realizan con motivo de la celebración de su 17 Congreso Nacional.