El merenguero retornó a los escenarios con una producción rica en letras y adaptada a este tiempo. Además del alegre ritmo de los dominicanos incluyó el género de la balada pop

POR JOSELIN RODRÍGUEZ
Tras regresar a los escenarios de la mano de una propuesta romántica y mucho más ágil en el ritmo, el merenguero Miguel Ángel dijo que continuará trabajando en esa línea porque el mundo está falto de más romanticismo.

El artista, que a jóvenes y adultos conquistó con su melodiosa y dulce voz en la década de los 90 mientras estuvo al frente de Sin Fronteras,  indicó que para cautivar al público tiene como carta de presentación  una producción de merengues y baladas,  adaptada a estos tiempos.  

“En un mundo que está tan lleno de violencia no creo que caiga mal un merengue de temática romántica, pero musicalmente un poco más movido, más enérgico, porque entendemos que la generación de ahora demanda mucha energía y en eso no nos queremos perder. Romántico, pero picadito”.

Para lograr el brillo y popularidad que tuvo el merengue en los 80, el intérprete de “No dejemos que muera el amor”, consideró que se debe continuar haciendo temas de mucha calidad y pletóricos de buenas letras tal y como se hacía en esa época.

“Hay mucha gente que todavía cree en el merengue bonito, de buena lírica, que te motiva a abrazar a tu pareja y a susurrarle cosas lindas y agradables al oído. Yo creo que hay un público fiel que todavía apoya esa música y ese tipo de valores”.

Miguel Ángel precisó que no está en contra de ningún género musical ni del merengue que hoy  se está haciendo, porque eso es propio de los tiempos que se están viviendo.

El retorno

Regresar a los escenarios  no surgió de la nada, pues en esa acción hay       un fin muy marcado. De acuerdo con sus propias palabras, fue  un proceso arduo y agotador para presentar un trabajo bueno.

“Queremos presentar un material excelente como hace falta en nuestro país. Esto no quiere decir que menospreciamos el que ya hay. Nuestro deseo es seguir aportando calidad”, dijo al concluir su presentación en la discoteca Jet-Set.

En ese centro de diversión interpretó un popurrí de los temas “No dejemos que muera el amor”, “Amarte a ti”, “Nubes de algodón”, “¡Qué bonito! y “Mi gran noche”. También incluyó “Me ha vuelto loco”, “No puedo con ella” (balada y merengue) y “Se me escapa el alma”, que grabó a dúo con Sergio Vargas. Cuando intentó cantar el tema con el merenguero y diputado, él  ya se había retirado. Como es un hombre precavido, la iba a cantar con Michael, uno de los coristas.  

Tras agradecer la labor realizada por el empresario Amable Valenzuela, el intérprete de “¡Qué bonito! dijo que está en una etapa de mucho crecimiento personal y artístico.

Explicó que su retorno está apoyado en una fuerte promoción radial, que  inició con la difusión de un medley de los merengues  que popularizó en Sin fronteras.

También está dando a conocer la balada “No puedo con ella”, autoría de Sergio George, y “Se me escapa el alma”, con las que espera conquistar el corazón del público.

Aunque reconoció que el merengue es su fuerte, ya que es el género en el que el público lo conoció, Miguel Ángel manifestó que si  aparece la oportunidad de grabar en cualquier otro estilo (como ocurrió ahora), lo hace, sin ningún  temor y  con la preparación adecuada.

 El artista recibió el apoyo de empresarios, músicos y cantantes.

 Miguel ángel, el artista

Desde que era un adolescente, el intérprete de “Nubes de algodón” mostró interés en el canto.

Es en su entorno donde primero da a conocer sus cualidades vocales. Ingresó a la banda de Dary Darys. Luego pasó a Sin Fronteras, orquesta en que fue líder y pegó muchos de sus éxitos.