CHIQUI VICIOSO
Decía, en un artículo anterior, que el PRD no parece haber entendido que el país votó masivamente, entre  otras razones, por un cambio de retórica y de estilo. Eso, que se refiere al lenguaje, también se aplica a la selección de sus candidatos presidenciales.

Leí en estos días que Pacheco pensaba aliarse con Miguel Vargas Maldonado y mi primera pregunta fue…¿Miguel quien? Luego me enteré de que había sido secretario de Obras  Públicas, que tiene muchísimos cuartos, que vive en un pent-house que su esposa ha abierto varias veces a las revistas de “Ritmo Social”, y que ella, en particular, tiene como aval el haber participado en una serie de anuncios de televisión sobre la buena vida, en la década de los sesenta.

Empero, ¿qué ha hecho ese hombre, además de ser rico y buenmozo, para candidatearse a presidente de la República Dominicana? Bueno, después del ejemplo de Berlusconi en Italia, lo único que le queda a los millonarios para entretenerse y darse a conocer internacionalmente (¡hay ya tantos!) es la presidencia de sus países… No relaje, ombe… ¡Pero, es verdad! Si, pero cuéntame que posición tiene ese señor frente a la juventud, el desempleo, la educación, la salud, el seguro social, la minusvalidez, los envejecientes, el aparato productivo nacional, el sector importador, las mujeres… Tú parece que eres de Suecia… No, aunque no lo creas soy de aquí y aquí hay ya mucha gente que formula las mismas preguntas. Much@s jóvenes educad@s e inteligentes, brillantes, que se plantean las mismas interrogantes, no ya sobre Miguel Vargas Maldonado si no sobre cualquier candidato o candidata que sea propuest@ para la presidencia del país. 

Lo primero que una se pregunta es ¿Y de dónde viene esta persona? ¿Qué ha hecho para considerarse digno o digna de nuestra confianza y nuestro apoyo? Ya eso de que un partido elija a la gente por sus cuartos o su linda cara pasó a la historia.

Recuerda la metida de pata de don Juan Bosch cuando eligió al buenmozón del José Francisco santiaguero.

Todo el mundo se preguntó ¿José Francisco, quién? Mientras, el PRD insiste en ignorar a sus mujeres, esas que le rehacen el muñeco cada vez que lo desbaratan con sus asaltos verbales, sus actos de corrupción (lo del Renove no convence a nadie), y esos cacicazgos que espantan.

Estoy segura de que el PLD apoyaría en masa a Miguelito Vargas Maldonado. Es la mejor manera de asegurar su permanencia en el poder. ¿No lo harías tú? No.

A mí lo que me preocupa son las 45,000, Cuarenta y cinco mil mujeres jóvenes que llenaron solicitudes para cien puestos de domésticas en España.

 Treinta mil en la capital y quince mil en Santiago. ¡Eso es increíble! No si analizas los últimos estudios sobre el tráfico y trata de mujeres al exterior.

Todas tenían entre 20 y 40 años; 50% tenía un nivel de escolaridad de primaria incompleta; todas tenían una experiencia laboral (frustratoria) previa, desde los 14 años en adelante.

 El 60% había laborado en zona franca; un 67% tenía como average entre dos y tres hijos; 75% eran madres solteras y ganaban aquí un salario promedio de treinta dólares al mes. La mayoría había emigrado del campo a la ciudad y no tenía cultura institucional para sacar su documentación (cédulas, pasaportes, cartas) de ahí que en un 87% de los casos se valiera de un reclutador masculino para “conseguirle los papeles”. Y de ahí la alta tasa de prostitución, como “trabajo remunerado”, de un 53% de las traficadas. Y mientras, el PRD durmiendo el sueño eterno. Y el PLD de estudio en estudio, seminario en seminario, taller en taller, conferencia en conferencia, y de consulta académica en consulta académica. ¿Y Miguelito?¿Quién?