Cuando se quiere se puede, según  un dicho popular, que demostró una vez más un  grupo de agricultores, encabezado por un compueblano que fue a la universidad y volvió a darle una mano para poner a producir el Proyecto de Desarrollo Agropecuario del Valle de Juancho, en Pedernales.  

Benjamín Féliz Sánchez, un emprendedor que cada vez que pasaba por el proyecto abandonado se apenaba, al saber que ahí había 18,000 tareas con riego por goteo llenas de malezas. Junto a dos técnicos y 64 parceleros, en octubre último logró la siembra de 1,200 tareas de habichuelas negras que están a punto de ser cosechadas para vendérselas al ministerio de Hacienda para Petrocaribe. Sólo sembraron esa cantidad por falta de financiamiento.   Hay sembradas, además, 200 tareas de plátanos de dos mil  contratadas para exportación a Estados Unidos. Hay planificadas mil tareas para la siembra de lechosa y otras mil para auyama, mediante contratos para el mercado local. También tienen una solicitud de una empresa norteamericana interesada en sembrar 10,000 tareas de orégano en otros terrenos que no tienen riego, pero que están al lado del proyecto. Igualmente, hay varias compañías de la Línea Noroeste interesadas en sembrar guineo orgánico en el proyecto de Juancho para exportación.

Ayudas y recuperación

Con el reducido equipo técnico que lo acompaña y la decisión de los productores, Féliz Sánchez preparó el proyecto y logró el apoyo del  Presidente Leonel Fernández y que la Lotería Nacional le asignara RD$2 millones durante tres meses, con los que se iniciaron las labores agrícolas.

Se ha logrado preparar 5,000 tareas, con el respaldo de la Oficina Gubernamental para el Desarrollo Provincial y la Dirección General de Frontera, que le han prestado equipos pesados, y el Ministerio de Agricultura le ha entregado material de siembra.

Con  RD$6 millones se ha logrado poner en funcionamiento ese gigante dormido que con solo la producción de habichuelas se va a logar recuperar más de RD$4.5 millones, según estimados de los técnicos.

Espera producir por lo menos 2.5 quintales por tarea, ya que cada mata tiene entre 40 y 50 vainas. Esta siembra es una novedad en la zona, por el buen desarrollo del cultivo y que nunca se había hecho de manera comercial. Esto nos va a permitir en la próxima cosecha de este año sembrar 10,000 tareas de habichuelas negras para Petrocaribe, afirma Féliz Sánchez, ex-director ejecutivo del Instituto para el Desarrollo del Suroeste (INDESUR). A partir de este mes, el proyecto va a recibir RD$5 millones mensuales que incluyó el Gobierno en el Presupuesto de Ingresos y Ley de Gastos Públicos para este año. Destaca el apoyo que le ha dado el Presidente Fernández al Proyecto de Desarrollo Agropecuario del Valle de Juancho, que creó mediante el decreto 668-09, y que no ha escatimado esfuerzo para contribuir a su rescate.

El proyecto

El proyecto, adscrito a la Presidencia de la República,  está en el valle de Juancho, entre Barahona y Pedernales. Es parte de los terrenos del desaparecido Instituto Nacional del Algodón. La instalación del  sistema de riego por goteo, con un costo de RD$300 millones, fue donado por el Gobierno de España y una contrapartida del Gobierno dominicano. Se inició en el 2001, primer Gobierno de Leonel Fernández, y terminó en  2003, con el Gobierno de Hipólito Mejía. Lo primero que se sembró con gran éxito fue tomate industrial, guandules y lechosa. El sistema de riego  no pudo mantenerse funcionando, por falta de recursos económicos, hasta octubre último cuando  volvió  a levantarse como Lázaro para seguir de pié. La obra estuvo a cargo del Instituto Nacional de Recursos Hidráulicos y el asentamiento de los parceleros al Instituto Agrario Dominicano. Se trata de un proyecto asociativo de tres fincas de 6,000 tareas cada una, divididas en bloques de 500 tareas con 32 parceleros cada uno. Cada finca tiene una laguna con más de 46 millones de galones de agua que se nutren del canal Nizaíto. De esas lagunas el agua llega a unas bombas de mando que la envía a las plantaciones.

Al lado de las 18,000 tareas con riego hay otras 12,000 en secano llenas de malezas y le pasa por el centro el Canal Nizaíto. Ahí se ha planificado la siembra de 10 mil tareas de orégano.

Inversiones y planes

Para rehabilitar el sistema de riego, desmontar y arar las 18,000 tareas del proyecto y otras 12,000 de secano, se necesitaría un presupuesto de RD$46.6 millones, incluyendo algunos equipos y maquinarias del proyecto, según el equipo técnico. Hay planes de crear cooperativas para que los 1,200 asentados se interesen más en poner la tierra a producir.

Hay trabajando 8 jóvenes bachilleres, egresados de la Escuela Agrícola de Enriquillo, con el sueldo mínimo, pero están motivados.

Zoom

Historia

Por varias década, el extenso valle de Juancho, ubicando en la división entre  Barahona y Pedernales, ha sido utilizado para la siembra de cultivos industriales como  algodón y sorgo, pero en los últimos años se ha incentivado el cultivo de productos comestibles como tomate,  lechoza hawaiana,  maíz,  plátano,  yuca y lo más novedoso, el actual cultivo de habichuelas negras, cuyas plantaciones muestran un desarrollo en condiciones óptimas que las hacen competir y superar el rendimiento por tarea en relación a lo obtenido en el valle de San Juan.

La cifra

6.0 millones de pesos.  Es la suma que ha recibido el proyecto y con la que se ha puesto a funcionar. Ya va a recuperar unos   RD$4.5 millones con las habichuelas negras.