La ex vicepresidenta Milagros Ortiz Bosch advirtió que la poderosa presencia de las tecnologías de la información y la comunicación ha impuesto nuevos desafíos a la credibilidad de la clase política, obligada a mantener una conducta transparente y apegada a las convicciones que dicen poseer y los valores y virtudes que proclaman.

Citó que si bien la revolución tecnológica permite a los políticos reducir los plazos que le tomaba darse a conocer y hacer llegar sus propuestas a los grandes públicos, así también esas capacidades pueden erosionar y hasta derribar rápidamente liderazgos que tomó largo tiempo cimentar.

La tecnología ha establecido una comunicación muy directa entre los políticos y los destinatarios de sus mensajes, que además de ser receptores del discurso político quieren ser escuchados con atención y tener participación en la política cuando se expresan de manera directa y abierta a través de las redes de internet, precisó.

Dijo que aunque cambie la tecnología y se pongan de moda nuevos conceptos y técnicas que deben ser aprovechados eficientemente, lo que no cambia es la responsabilidad de representar con seriedad y firmeza, pues cuando los ciudadanos votan por una candidata le están entregando su confianza en que van a actuar en sintonía entre los compromisos y el interés de la gente.

La alta dirigente del Partido Revolucionario Moderno, PRM, que ha sido dos veces senadora de la República y fue secretaria de Estado de Educación, y que ha impartido cátedra de Ciencias Políticas en la Universidad Nacional Pedro Henríquez Ureña, hizo el señalamiento en la inauguración del curso Participación Política, Candidatas 2020, organizado por el Centro de Estudios de Política Públicas (CEP) con apoyo de la Fundación Friedrich Ebert.

El acto contó con una introducción descriptiva del curso, a cargo de la directora ejecutiva del CEP, diputada Gloria Reyes, y la exposición de Laura Hernández “Participación Política con Enfoque de Género”. La apertura del curso tuvo la presencia de 70 aspirantes congresuales y municipales y otras interesadas provenientes de diferentes partidos políticos y representantes de 12 provincias.

El curso tendrá una duración de 7 semanas y la participación de destacados académicos y especialistas en diferentes disciplinas, conforme el programa diseñado por el CEP.