MILÁN, ITALIA (EFE).- La pasarela de la moda masculina de Milán propuso para el próximo otoño-invierno un hombre con imagen de tener buenas maneras, pero sin descuidar algunos coqueteos con la estética «rock», gracias a diseñadores como Ferré, Dolce&Gabbana y Biaggioti. El estilista italiano Gianfranco Ferré defiende un hombre con buenas maneras y aspecto pulcro, que recuerda de algún modo un estilo «kennediano» y desenvuelto.

Se puede llevar un blazer en visón, una chaqueta azul en cachemir o un traje mil rayas, sobre los cuales lucir un chaquetón de color calabaza, completado con pantalones en algodón blanco, trencas suaves o equipos de gimnasia con capucha.

Para la noche, el hombre Ferré viste con pantalones de raso negro o bien tipo militar, chaquetas de corte tuxedo y camisas blancas plisadas, con la opción del cardigan decorado con pequeños cristales.

Dolce&Gabbana, que ya presentaron el domingo pasado su colección para los adultos, ofrecieron hoy sus propuestas para los más jóvenes, inspiradas en el concepto de «rock romántico».

Abunda el cuero negro, que se advierte en los chalecos y en las cazadoras cortas, en las que hay ojales de los que sale una rosa roja.

Entre los pantalones hay dominio de la tela vaquera y los jerseys están decorados en corazones en lugar de los tradicionales rombos, mientras para la noche D&G ofrecen camisas plisadas, camisetas oscuras, pantalones de piel, corbatas pequeñas y trajes en un negro que no da miedo, sino ternura.

Por su parte, Laura Biaggioti quiere dar al hombre del próximo otoño-invierno la imagen de un joven profesor o de un buen estudiante, con libros bajo el brazo, gafas de intelectual y bien peinado, basado en la idea de que la moda es más cuestión de estilo que de edad.

Por eso se vio a los modelos pasear al estilo «Príncipe de Gales», con amplios cardigan tricotados, pantalones de cachemir y cazadoras de aviador en las que se mezclan diversos motivos decorativos.

El jersey de cuello alto se combina con la chaqueta o con una de tipo deportivo con capucha y hay espacio para los complementos, como las bolsas de piel envejecida, corbatas luminosas o calzado de gimnasia en tartán y piel.

En la jornada de hoy en la pasarela milanesa hubo tiempo para un especialista del calzado, la firma Tod’s, que ha lanzado el mocasín en piel de cocodrilo, las deportivas en ante gris y el botín que se puede llevar para caminar por el campo, pero también en ciudad.

La casa Missoni se ha inspirado en el mundo de los gitanos para su nueva colección, con la idea de la libertad y un cierto romanticismo, que se traduce en camisas estampadas, chalecos decorados con rosas enormes y pantalones mil rayas.

Los hombres llevan un sombrero por encima de un pañuelo de flores anudado en la nuca, un bolso en bandolera y botas con tachuelas esmaltadas.

Mientras tanto, el diseñador Luciano Barbera recupera la figura del «gentlemen» de los años 60, con trajes ligeros de corte clásico, como saldrían de una sastrería, complementados con chalecos.