La alegría de recibir personalidades de la vida nacional y de otras latitudes del mundo, hizo que la embajadora de Serbia, Milena Lukovic Janovic, y el cónsul honorario Ramón De la Rocha, pasaran una velada inolvidable. Y no era para menos: pues se trataba de la apertura del primer Consulado de ese país europeo en Santo Domingo.
Hoy me siento muy honrada de ofrecer esta recepción con motivo de nuestro Consulado, con lo que, a su vez, marcamos el comienzo de diversas y fructíferas actividades que nos van a brindar el desarrollo sostenible de las relaciones bilaterales, estatales, económicas y científico-técnicas para el bien de nuestros países, dijo la embajadora. Luego de esta alocución, Ramón De la Rocha se dirigió a los presentes ahora en español, bromeó, en relación al discurso de la embajadora en un castellano entrecortado.
El cónsul dijo tener confianza en poder desempeñar su posición apegado a las normas y espíritu de trabajo y de colaboración recíprocas que demandan los dos países.
Desde hace cinco años hemos estado ayudando en diversos asuntos a las autoridades diplomáticas de
Serbia con sede en Cuba, quienes decidieron que era necesario el establecimiento de un Consulado.
Tras los discursos, los invitados compartieron entre conversaciones amenas y degustaron una variedad bebidas espumosas y bocadillos.