NUEVA YORK, EE.UU.  (EFE).- Merengue, bachata y desbordante alegría se destacaron ayer en el tradicional desfile dominicano por la sexta avenida de Nueva York, que este año celebró su 25 aniversario.

Miles de banderas rojas, azules y blancas llenaron de color la importante arteria, conocida también como la avenida de las Américas, donde los dominicanos acudieron desde temprano para celebrar con orgullo el 145 aniversario de la Restauración de la República.

También para celebrar su presencia y aportes a esta ciudad, donde, según el consulado, pueden haber hasta un millón de dominicanos, lo que convierte a la Gran Manzana en el hogar del mayor número de quisqueyanos fuera de su país.

Los dominicanos poseen el mayor número de bodegas en la ciudad así como de taxis que brindan servicio fuera de la zona metropolitana de Manhattan y se caracterizan, además, por ser propietarios de supermercados, restaurantes y salones de belleza, entre otras empresas.

Tienen, asimismo, una importante presencia política. “La sociedad dominicana aquí en Nueva York es progresista y laboriosa y ha compartido desde su llegada con los neoyorquinos su vida cotidiana”, comentó el cónsul Eduardo Selman, mientras que el asambleísta estatal Adriano Espaillat aseguró que a los dominicanos “le pertenece el futuro de esta sociedad”.

“¡Dominicanos!”, gritaban con orgullo a su paso las cientos de personas que marcharon a lo largo de la sexta Avenida, en tanto que sus miles de compatriotas respondían con alegría y enarbolaban en alto el símbolo nacional, bajo el candente sol de verano.

La presencia del famoso grupo Aventura en una de las carrozas causó gran furor así como de la “reina del merengue”, Milly Quezada. Otra artista que acudió a compartir con sus compatriotas fue Kat de Luna, quien tiene a su cargo abrir el torneo de US Open en Nueva York.

Como cada año, grupos folklóricos, bandas y los populares personajes del folclor dominicano participaron del desfile como los coloridos diablos cojuelos, entre los que se destacaron los del carnaval vegano, el más famoso de la República Dominicana, que lucieron este año un brillante vestido morado.

También las marchantas con su canasta, un tributo a las mujeres que van por los barrios vendiendo frutas y la paletera, que a su paso lanzó dulces al público.

No podía faltar la Roba la Gallina, un hombre disfrazado de mujer, con busto y trasero abultado, que va por establecimientos comerciales y pide para sus pollitos, que no son más que los jóvenes del pueblo que le siguen en alborozada procesión.

También participaron políticos locales, así como un nutrido grupo de campaña de Miguel Vargas, quien aspira a la presidencia de la República Dominicana, ya que los quisqueyanos pueden votar desde el exterior para elegir el presidente y vicepresidente.

Aunque tradicionalmente el evento comienza con la participación del alcalde de la ciudad, este año Michael Bloomberg desfiló detrás del grupo que dio inicio a la parada, junto a su comisionado de asuntos de inmigración, Guillermo Linares, la presidente del concejo municipal, Christine Quinn, y el cónsul Selman.

El desfile fue dedicado al conocido líder político Hatuey De Camps, quien hace cuatro años fundó el Partido Revolucionario Social Democrático, y que cortó la cinta junto a Nelson Peña, organizador del evento, y el presidente del condado de El Bronx, Adolfo Carrión.