Con mucha tristeza y dolor, cientos de personas le dieron un último adiós a Yordano Ventura, el joven lanzador de 25 años de los Reales de Kansas City, que falleció en un accidente automovilístico durante el fin de semana.
La plana mayor de los Reales de Kansas City, incluyendo al presidente del equipo, David Glass; el gerente general, Dayton Moore; el vicepresidente René Francisco y el dirigente Ned Yost, así como los jugadores Eric Hosmer, Mike Moustakas, Salvador Pérez y Alcides Escobar viajaron a esta localidad para despedir a quien definieron como “un miembro de la familia”.
“Es una pérdida irreparable, sin lugar a dudas. Ahora mismo ni siquiera estamos pensando en béisbol porque hemos perdido a un familiar, a un muchacho que vimos crecer dentro de la organización desde que era un niño”, dijo Dayton Moore a redactores de Hoy.
“Me siento muy mal, Yordano era como un hermano. Nosotros crecimos juntos y estar sin él no va a ser nada fácil”, agregó Salvador Pérez, su receptor desde ligas menores.
Un muchacho con mucha adrenalina, que en ocasiones era malentendido y cuestionado como un buscapleitos, Ventura era el muchacho que todos en Kansas adoraban.
“Yordano era un muchacho muy bueno; la gente quizás lo recuerda como el que se metió en pleitos en muchas veces, pero él era un tipo alegre al que todo el mundo quería”, dice René Francisco, al diario Hoy.
A pesar de rumores de que Ventura quedó con vida tras el accidente y que fue atracado por desaprensivos y abandonado a su suerte, esa versión quedó descartada por el médico legista que levantó su cuerpo.
“Él murió instantáneamente, el accidente fue fatal y fulminante. Es una pena. La Policía está investigando si pasó algo más, pero Yordano murió en el acto”, dijo una fuente del equipo.
Peloteros de Grandes Ligas como David Ortiz, Pedro Martínez, Robinson Canó y Fernando Rodney estuvieron presentes en el sepelio.
“Esto es algo que no debería de suceder”, dijo llorando David Ortiz. “Tenemos que crear conciencia todos, para que cosas como estas no se repitan”, agregó el dominicano Robinson Canó.