Miles de fieles católicos de distintos sectores de Sabana Perdida y La Victoria realizaron hoy un viacrucis, en demanda de mayor seguridad para sus residentes en combate a la delincuencia e inseguridad que impera en los últimos años.
Tras participar en el viacrucis de Viernes Santo, sacerdotes y feligreses de la Iglesia Católica de la zona pidieron a las autoridades hacer frente a las bandas y pandillas que azotan los diversos barrios y mantienen atemorizados a sus moradores.
“La inseguridad ha alcanzado niveles alarmantes, generando temor en nuestras calles y hogares. Es fundamental implementar medidas efectivas para enfrentar este flagelo y proteger a nuestros feligreses y a toda la comunidad en nuestra zona pastoral”, expresó el Reverendo Padre Faustino Plascencia, párroco de la Parroquia San Antonio de Padua en La Victoria al leer el manifiesto.
Explicaron que estos antisociales representan una amenaza para las comunidades que conforman Sabana Perdida y La Victoria, y piden a la Policía Nacional brindar más seguridad.
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“Las bandas y pandillas que operan en nuestras cercanías, incluso llegando hasta las escuelas, representan una amenaza para los niños, la juventud y la tranquilidad de la comunidad. Es urgente abordar este problema y garantizar un ambiente seguro para nuestros niños y jóvenes”, afirmó frente a miles de personas que caminaban con la cruz a cuestas desde Barrio Nuevo hasta La Victoria.
Por otro lado, los católicos exigieron a la Policía Nacional poner un alto a los agentes que incurren en malas prácticas en el ejercicio de sus funciones, a fin de restaurar la confianza de la comunidad en la institución que esta llamada al orden y seguridad de los ciudadanos.
“Los puntos de drogas y la extorsión por parte de algunos agentes de policía desacreditan la institución y debilitan la confianza de la población en las autoridades. Es necesario tomar medidas concretas para erradicar estas prácticas y restaurar la confianza en las fuerzas del orden”, manifestaron en este día en que la Iglesia en todo el mundo conmemora la Pasión y Muerte de Jesús en la cruz.
Asimismo, pidieron brindar protección y seguridad a las personas que denuncian contaminación sónica a través del Sistema Nacional de Atención a Emergencias y Seguridad 911.
“La falta de seguridad para los denunciantes y la contaminación sónica generada por la música en horario nocturno son situaciones que requieren atención inmediata. Debemos velar por el bienestar de todos los habitantes y garantizar un entorno tranquilo y saludable”, añadieron.
Instaron a las autoridades abordar la problemática que afecta residentes de La Victoria ante la presencia de invasores de tierra, además de las motocicletas que calibran en las calles poniendo en peligro la vida de los transeúntes.
“Ningún problema debe ser pasado por alto en nuestra labor de proteger y promover el bien común”.
“Autoridades civiles y militares en nombre de nuestra ciudadanía queremos que se apliquen las normas y leyes para que nuestras comunidades, sectores, barrios y los campos de la Victoria tengan garantizada su seguridad”, demandaron junto a feligreses que desde las 5:30 de la mañana caminaban con fe y esperanza.
El viacrucis fue encabezado por su arcipreste, el Reverendo Padre Delso Paulino Paulino, párroco de la Parroquia Agua Santa y participaron sacerdotes, vicarios, diáconos y religiosas de la Zona Pastoral.
Estuvieron presentes los sacerdotes Roberto Martínez de los Santos, párroco de San Roque González; Faustino Plascencio, párroco de San Antonio de Padua en La Victoria; Rodrigo Hernández Moreno, párroco de las parroquias Santa Rosa de Lima, San Juan Diego y San Martín de Porres, junto a su vicario Juan Miguel Castillo Carmona.
También participaron los presbíteros Wagberto Gabriel Díaz Cuevas, párroco de San Francisco Solano y Joel Villafaña Nicolás, de Nuestra Señora de América Latina, madre de todas las parroquias.
Asimismo, asistieron los diáconos Julio Nelson Germán, coordinador zonal; Mirope Hernández, Salatiel Batista, Jonathan Rodríguez y Rogelio Cabrera.