«Jóvenes unidos por amor», fue el lema que se repetía una y otra vez con entusiasmo en el encuentro Jamar 2022 (Juventud Arquidiocesana de la Mano con el Arzobispo), actividad que cerró por todo lo alto la Semana Vocacional de este año.
La actividad inició formalmente a las 9:00 de la mañana con la presencia de miles de jóvenes de todas las Vicarías del país, quienes con alegría llenaron las instalaciones del Polieducativo Loyola, escenario perfecto para concentrar de Norte a Sur, de Este a Oeste, a miles de jóvenes unidos por amor a las vocaciones.
La religiosa Sor Radaelys Aybar y Carlos Naveo fueron los encargados de animar de principio a fin el encuentro, quienes con su chispa y su talento animaron a todos los jóvenes que allí se congregaron.
De inmediato el Reverendo Padre Franklin Camacho Grullón, director de la Pastoral Vocacional y vicerrector del Seminario Menor Jesús Buen Pastor, fue quien hizo la oración de apertura y dio la bendición a todos.
Con mucha sencillez, calidez y carisma la artista Alba Pantaleón animó y activó a los jóvenes con su participación.
Mientras conversaba con ellos y daba su testimonio de vida, los jóvenes levantaban sus manos para alabar al Señor y orar.
La actividad iba desarrollándose de manera activa y los jóvenes seguían llegando y llenando todo el lugar, pero sin duda alguna nada volvió a ser igual después de que llegara al Polieducativo la persona más importante, el Señor Jesucristo, en el Santísimo Sacramento del Altar.
Jesús fue expuesto por casi una hora y fue el centro de todo, adorado por los que estaban allí, incluyendo al Arzobispo Metropolitano de Santo Domingo, Francisco Ozoria Acosta, quien de manera sencilla llegó al lugar quedándose contemplando al Señor de frente como si fuera un joven más del Loyola.
Durante la Adoración Eucarística estaba animando la Agrupación de Edward Muñoz, mientras que un sacerdote y una religiosa daban testimonios sobre la llamada que recibieron a la vida consagrada.
Uno de los momentos más sublimes fue cuando decenas de jóvenes que sienten alguna inquietud vocacional, o ya han sido llamados, uno a uno fue de rodillas ante los pies del Señor, para que él según su voluntad termine felizmente la obra que inició.
Tras la bendición del Señor a todos los presentes, el productor y conductor René García dio una breve charla en la que invitó a los jóvenes decir que sí al Señor con valentía a la llamada que haga a cada uno de nosotros, ya sea a la vida matrimonial, sacerdotal o religiosa.
«La primera vocación es vivir el bautismo, la confirmación y la vida Eucarística», dijo García tras dar su testimonio.
Manifestó que la vocación es ser siervos y abrirnos a vivir en Jesús, y que debemos vivir la vocación escuchándolo y esperando en el tiempo de Dios, ya que él nos inquieta sin robarnos la paz.
La Eucaristía dio inicio a las 11:05 de la mañana, presidida por Monseñor Francisco Ozoria Acosta, Arzobispo de la Arquidiócesis de Santo Domingo y una decena de sacerdotes que le acompañaban.
Al iniciar su homilía Monseñor invitó a los jóvenes a esforzarse por vivir nuestra vocación cristiana, la vocación a ser seguidores y discípulos de Jesucristo.
En la celebración eucarística participaron una decena de sacerdotes entre los que se destacan el Reverendo Padre Antonio Pozo, rector del Seminario Menor Jesús Buen Pastor; el Reverendo Padre Franklin Camacho, director de la Pastoral Vocacional y vicerrector del referido seminario.
También participó el Reverendo Padre Roberto Martínez, fundador y promotor de Jamar, y el Reverendo Padre Jhonatan Morales, entre otros.
Monseñor Ozoria dijo que el joven cristiano debe vivir su vida con todo el dinamismo sin perder de vista a Jesús.
«El joven discípulo de Jesús el joven cristiano debe de vivir su vida con todo el dinamismo de la juventud, debe vivir su vida con todo ese ardor y efusión, debe vivir su vida con todas sus inquietudes identificándose con Cristo Jesús», sostuvo.
Ante miles de jóvenes congregados en el Polieducativo Loyola, Ozoria Acosta explicó que lo fundamental es vivir su vocación como cristianos.
«Nuestra vocación cristiana es fundamental, que nosotros vivamos nuestra vocación cristiana, la primera vocación es esa vocación a la vida cristiana», enfatizó el Arzobispo.
Dijo que el joven que vive en la jurisdicción de la Arquidiócesis de Santo Domingo debe sentirse llamado a empoderarse de esta Iglesia particular.
Aseveró que «un joven se empodera participando de las actividades de esta Iglesia, participando de la vida y dinamismo de esta iglesia particular que es la Arquidiócesis de Santo Domingo».
Monseñor dijo que la Arquidiócesis es de cada uno de los cristianos y que cada uno está llamado a empoderarse de la vida y misión de esta iglesia particular.
En ese sentido, dijo que la Iglesia Católica dominicana un pueblo que la comunión y la sinodalidad van en la misma línea.
«Formamos comunidad de la mano significa que no estamos separados, que no estamos cada quien por su lado, de la mano significa que estamos en comunión y caminamos juntos estamos en comunión», sostuvo.
El Arzobispo dijo que como Iglesia caminan juntos hacia la evangelización, ya que son misioneros y deben hacerlo con perseverancia.
Al culminar la Eucaristía el Reverendo Padre Franklin Camacho agradeció a todos los jóvenes por su participación, al arzobispo, sacerdotes, artistas, ministerios, pastorales y colaboradores que trabajaron para Jamar en su sexta versión.
Jamar continuó su gran celebración con la participación de varios artistas católicos que pusieron a todos los jóvenes a moverse y todos unidos encendieron con su chispa un encuentro por amor a las vocaciones.
Los jóvenes con todo el vigor que les caracteriza bailaron y disfrutaron sanamente la alegría de vivir su vocación como cristianos.
La actividad inició formalmente a las 9:00 de la mañana con la presencia de miles de jóvenes de todas las Vicarías del país, quienes con alegría llenaron las instalaciones del Polieducativo Loyola, escenario perfecto para concentrar de Norte a Sur, de Este a Oeste, a miles de jóvenes unidos por amor a las vocaciones.
La religiosa Sor Radaelys Aybar y Carlos Naveo fueron los encargados de animar de principio a fin el encuentro, quienes con su chispa y su talento animaron a todos los jóvenes que allí se congregaron.
De inmediato el Reverendo Padre Franklin Camacho Grullón, director de la Pastoral Vocacional y vicerrector del Seminario Menor Jesús Buen Pastor, fue quien hizo la oración de apertura y dio la bendición a todos.
Semana Vocacional
La Pastoral Vocacional de la Arquidiócesis de Santo Domingo dedica una semana a las vocaciones, realizando diversas actividades para estimular a los jóvenes a descubrir su vocación a través del llamado que realiza Dios a los cristianos.
Este año la Semana Vocacional tuvo lugar desde el domingo 6 al 13 de noviembre y se llevaron a cabo programas radiales, visiteos a los colegios educativos, entrevistas, Instagram Lives, rezos del Santo Rosario, entre otras actividades.
Ayer esta semana fue cerrada con broche de oro con la actividad Jamar, encuentro que esperan los jóvenes cada año y que los agrupa de manera multitudinaria en algún polideportivo de la ciudad.
La Pastoral Vocacional es el servicio que promueve entre adolescentes y jóvenes las vocaciones sacerdotales, a la vida consagrada, al matrimonio cristiano y a los ministerios laicales, a la vez que se ofrece un proceso para descubrir su vocación específica en la Iglesia y hacer opciones de vida.
La Iglesia Católica promueve las vocaciones a través de esta pastoral para que cada uno, como miembro del Cuerpo de Cristo pueda discernir su vocación, que aquellos que conocen a Jesús acepten el llamado que les hace y se mantengan firmes en su respuesta. Audiovisuales tomados de la Comisión de Comunicación y Prensa de la Zona Pastoral Sabana Perdida- La Victoria.