Miles de usuarios del Metro de Santo Domingo quedaron varados ayer al producirse un fallo técnico  en uno de los vagones, que no pudo subir a los rieles al momento de iniciar sus labores en la estación Máximo Gómez, donde funciona el Patio de Maniobras.

La avería se mantuvo durante toda la mañana, obligando a los técnicos de la Opret a trabajar durante varias horas.

Es la quinta ocasión en que el tren se detiene por averías, pero esta es la primera por una falla mecánica, ya que las anteriores había sido por problemas eléctricos, resueltos antes de los 30 minutos.

El fallo mecánico se prolongó por casi seis horas, y  fue pasado el mediodía   cuando pudo ser resuelto el problema y restablecido el servicio, interrumpido  entre las estaciones Máximo Gómez y Mamá Tingó, afectando a los pasajeros de Santo Domingo Norte y la provincia de Monte Plata.

El ingeniero Leonel Carrasco, subdirector de la Oficina para el Reordenamiento del Transporte (OPRET), informó que ya a las 6:30 de la mañana había alrededor de 20 mil  usuarios afectados por el accidente, que en su mayoría llegaron tarde a sus trabajos, centros de estudios, citas de salud y otras diligencias.

El funcionario explicó que la falla se produjo cuando uno de los trenes hacía las maniobras para entrar a los rieles por donde circulan estos aparatos quedando uno de los vagones atascado en el proceso, impidiendo el desenvolvimiento de los demás, sobre todo, desde la estación Máximo Gómez hasta la Mamá Tingó.

Carrasco atribuyó la demora en el restablecimiento del servicio a que se trata de tecnología de punta, y por tanto había que tener mucho cuidado en cada uno de los pasos para no afectar otras áreas.

Además, dijo, se ordenó tumbar el servicio energético desde la estación Máximo Gómez hacia La Mamá Tingó, para que los técnicos pudieran trabajar sin peligro, tras recordar que el tren se mueve con electricidad de alta tensión.