ROMA.  AP.  Decenas de miles de opositores se manifestaron ayer por las calles del centro de Roma y exigieron la dimisión del primer ministro, Silvio Berlusconi.

  El líder del Partido Democrático, Perluigi Bersani, dijo a la multitud que su fuerza política está dispuesto a trabajar con otras de la oposición para encabezar un nuevo gobierno.

   “Si hay discontinuidad y cambio, estamos dispuestos con la demás oposición a crear un nuevo gobierno”, expresó Bersani a la multitud en la Plaza San Giovani.

   La permanencia de Berlusconi en el poder se ha debilitado debido a la crisis de la deuda soberana y a pugnas internas en su coalición, lo cual ha impedido la adopción de medidas claras.   Seis miembros del partido de Berlusconi lo exhortaron esta semana a que renuncie y permita la formación de una coalición más amplia con un partido centrista de oposición.  

Los inconformes llegaron en autobuses y trenes desde diversas partes de Italia y se les unieron políticos de centroizquierda de Francia y Alemania, así como un grupo de mujeres procedentes de Ucrania del grupo Femen, que mostraron sus pechos desnudos.  

“No tenemos credibilidad. Me avergüenzo de cómo nos miran los demás países europeos. Es lamentable. Este individuo (Berlusconi), esta marioneta, debe irse”, dijo Mario Puddu, quien es un jubilado.   Berlusconi ha prometido someter a un voto de confianza la nueva legislación que pretende la Unión Europea para apuntalar la economía de Italia.

La clave

 Nuevas medidas  favorecerían a jóvenes y  mujeres

Las medidas incluyen un plan de privatizaciones, beneficios fiscales para estimular el empleo a los jóvenes y la reintegración de las mujeres en la fuerza laboral. La legislación también liberalizará las horas de funcionamiento de las tiendas y abrirá las profesiones cerradas.