Milly y Gilberto contagian con ritmo y sabor

Milly y Gilberto contagian con ritmo y sabor

POR REYES GUZMÁN
Milly Quezada y Gilberto Santa Rosa hacen pareja perfecta para llegar al público con el sabor del merengue y la salsa. Se presentaron el viernes en el óvalo de la Feria Ganadera, donde por separado y después juntos merecieron una descarga de aplausos.

Milagros Germán y Jochy Santos estuvieron como presentadores, demostrando la veteranía en grandes eventos.

A las 9:30 comenzó Milly invitando con su estilo de merengue a todos a bailar. Ella es la reina, la mujer que sabe con gracia interpretar la música criolla. Su hijo le sigue los pasos para reflejar la herencia. Juntos cantaron “Yo soy”, que grabara a dúo con Ramón Orlando.

A Gilberto le tocó cantar a las 10:30 y con “La conciencia” y “Vino tinto” daba sus primeras entregas. Una buena química en “Para darte mi vida”, con Milly y Gilberto abrazados, causó no sólo aplausos, sino comentarios de que se veían bien, que quiera Dios que el amor los toque.

Más que un concierto, fue una fiesta gozada y aprovechada por quienes pagaron RD$1.500 en VIP y RD$600 en gradas. Se bailó y los más románticos se amargaron con las letras de sentimiento que envuelven boleros y salsa en la voz de Santa Rosa, quien bajó de la tarima para sentir más de cerca el calor de la gente.

La improvisación es un recurso que Gilberto usa para jugar con situaciones, lo que es del agrado de sus seguidores. A las 12:00 concluyó con “La agarro bajando”.

COSITAS Y COSOTAS

– Fuegos artificiales al inicio y al final adornaron la presentación de Milly y Gilberto. Una mujer se distingue en la orquesta de Gilberto. Ella hace coro y toca la trompeta, y de qué manera.

– Colocar en pantalla los gestos de muchos del público daba un espectáculo. Un hombre, por su forma de bailar dando brinquitos y mover los brazos, llamó la atención. Hasta Gilberto lo comentó diciéndole Hipólito, en referencia a que es calvo.

– Una señora fue un mar de lágrimas cuando el artista interpretó el bolero “Mentirás”. Los recuerdos la atormentaron, hasta el punto que su mejor desahogo fue llorar.

– Las parejitas unían sus rostros, bailaban merengue, salsa y boleros.

– La Cervecería aprovechó su patrocinio para dar a conocer un nuevo envase de su producto.

– “Milly luce de 15. Está como manda el librito, como el médico me la recetó”, dijo un joven. Y es de verdad que está bonita.

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