Quién quita que se tenga un mini zoológico de aves comerciales atractivo?

Muy por lo contrario, las aves comerciales pueden ser muy atractivas y un mini zoológico de estas es una atracción en cualquier comunidad, especialmente donde la avicultura comercial es importante como actividad productiva y de vida para sus ciudadanos.

Comunidades como Moca, Licey, Cayetano Germosén, La Vega, Pedro Brand  y otras, donde se tienen producciones significativas de aves para carne y huevos, donde bien podrían entusiasmarse los munícipes e inclusive los productores, para promocionar la crianza avícola.

Además, el Ministerio de Agricultura y su Dirección General de Ganadería; el Ministerio de Turismo, la Liga Municipal Dominicana e inclusive el Ministerio de Educación, en coordinación con las Cámaras de Comercio locales, las Asociaciones de Desarrollo, le harían un gran servicio a sus comunidades y a la industria avícola.

Muchos se preguntarán cuántas posibles especies se pueden mostrar y dentro de estas cuántas razas o líneas de razas. Las enuncio a sabiendas de que me faltarán algunas, siendo estas las principales conocidas: gallinas comerciales para huevos, las de pollos asaderos, de lidia y las ornamentales, gallinas de guinea, patos, faisanes, avestruces, pavos, gansos, palomas; perdices, codornices, entre otras.

Ahora surge la pregunta del millón de pesos. ¿Cuántas razas de gallinas pueden ser exhibidas en este mini zoológico? Si solo vemos esta especie, entre las especializadas en huevos o carne, las de doble propósito, las de lidia y las ornamentales, diría que unas cien razas podrían formar parte del parque. Ellas solas pueden formar un mini zoológico.

Algunos dirán ¿cuántas razas de faisanes o pavos se pueden mostrar? Les diríamos que diez de una y cinco de otra. En el caso de las guineas podrían ser cuatro líneas y de codornices dos, pero de avestruz una.

Lo bueno sería ver una al lado de la otra, como una Minorca Negra al lado de una Minorca Blanca, de una codorniz blanca de media libra al lado de una avestruz de ciento cincuenta libras.  

Claro está que la idea no es solo de mostrar un ejemplar, si no algunas réplicas en grupo para que se vea su colorido o belleza, en otros casos un macho con varias hembras para evitar peleas, como en las razas de lidia.

Otra pregunta sería cómo alimentarlos y su costo. Eso es cierto, pero con los aportes de los visitantes y los que apadrinen el mini zoológico, se pueden adquirir los alimentos balanceados, los cereales o los alimentos en general. Estas especies no son costosas como los felinos e inclusive las aves ornamentales, que necesitan de comidas especiales. Su forma de alimentación, permite que en muchas veterinarias y tiendas de venta de alimentos se encuentren estos.

La sostenibilidad económica también puede lograrse con la venta de huevos y réplicas que se produzcan en el parque, además de las entradas de visitantes, pero este centro debe servir para fomentar el consumo de algunas especies o sus artesanías. ¿Cómo veríamos el poder consumir o adquirir un faisán, un pato asado al estilo chino, una cartera de piel de avestruz o sus plumas?  ¿Verdad que sería innovador y llamativo poder comer o conocer mejor estas especies?

Otras entradas puede venir de la venta de libros, folletos y videos sobre crías, pero además de recetarios de platos para consumo, artesanías y una multiplicidad de usos variables, que estimularían la industria avícola nacional en diferentes lugares del país y estimularía a los futuros productores, pues este mini zoológico de aves, bien puede estimular a los niños que deseen criar dichas aves, serían nuestros futuros productores avícolas.

La sanidad del parque se tendría de igual manera como se tiene en otros zoológicos y granjas comerciales, por lo que esto no sería un grave problema.

Uno de los aspectos más importante y relevante de este Mini Zoológico es mostrar la biodiversidad existente en la naturaleza, lo que nos estimula a todos a querer y respetar más la naturaleza y lo que esta nos da.

Este tipo de parque debe estimular mucho a la sociedad, debe ser obviamente temático, educativo, turístico, participativo y en lo posible científico.