La educación es la base del desarrollo y nunca debemos  cansarnos de repetirlo e inclusive de implementar acciones tendentes a lograr sus objetivos. Por igual que lo sencillo también puede ser poderoso y educativo.

Ahora bien, si podemos establecer proyectos que sean educativos y que sirvan de entretenimiento a la población, en especial a los niños, la idea es aún más productiva. En este medio de comunicación, el Hoy, recientemente escribimos un artículo sobre “Mini Jardines”, y éste, que   es sobre animales, lleva el mismo concepto o idea. El demostrar y estimular el establecimiento de pequeños zoológicos a nivel comunitario que diversifiquen nuestra oferta educativa y de entretenimiento en toda nuestra geografía.

No me canso en reconocer que nuestros grandes parques, además de bellos son bien administrados dentro de las posibilidades económicas del país, pero en coordinación con los ayuntamientos y la sociedad civil, mucho puede y debe ser hecho para bien de todos. Los mini jardines de plantas son menos costosos de mantener, pero los mini zoológicos son muy atrayentes debido a que los animales expresan vida con movimiento.

Debido al costo de mantenimiento y a la diversidad más restringida de las especies, los Mini Zoológicos a proponer son menos en variedad, pero igual en efectividad. Algunas de las especies que propondríamos considerar deben ser fáciles de cuidar, alimentar y tratar clínicamente. No consideramos que se contemplen los grandes felinos o grandes herbívoros u otras especies exóticas, por una sencilla razón, en nuestros parques, el Zoodom y el Acuario Nacional, encontramos esas diversidades. Un león, un rinoceronte o un mono, son difíciles de mantener en dieta e instalaciones. 

Ahora bien, si los Mini Zoológicos se coordinan entre los ayuntamientos, las cámaras de comercio locales, los ministerios de Educación, Medio Ambiente y Agricultura, ONG locales, productores, entre otros participantes, por región podemos tener una diversidad de muestras vivas, disecadas o en materiales visuales diversos. Imaginemos que en un Mini zoológico de aves tengamos exhibiciones de los huevos de dichas especies desde la de un picaflor a una avestruz, que mediante láminas veamos el “empolle”, salida y cría, pero por igual en uno de reptiles, mamíferos o de un acuario dulceacuícola, una exposición de exoesqueletos que muestren el de un pez, reptil, ave a un mamífero.

Estos son solo muestras educativas posibles para las clases de biología. Una colección de caracoles, además de bella, es atrayente. ¿Dónde ubicar los Mini Zoológicos? Recuerdo que en una visita  a Taiwán, de donde se me afianzó la idea, estuve en  un liceo secundario y estos me mostraron un acuario escolar vivo, disecado y en fotos, donde ellos mostraban a los estudiantes estas especies por una razón: “no es que los chinos comemos peces así por así, es que educamos para su conocimiento y consumo a las nuevas generaciones”.

El ejemplo de Taiwán, si lo aplicamos aquí, nos demuestra que pueden estar en escuelas como en parques municipales e inclusive en parques privados como negocios cobrando.

En San Diego, California, Estados Unidos, tienen uno de los mejores zoológicos del mundo, pero visité uno cuya especialidad o atracción principal estaba en los caballitos de mar. Ahora bien. Ustedes se preguntarán cuáles especies trabajar o mostrar y sé que los amantes de los animales lo comprenderán fácil. ¿Qué les parece lo siguiente? Que las exhibiciones tengan siempre un mensaje para que además de educativo o entretenimiento se puedan establecer como negocios que despierten el emprendurismo del visitante. Un acuario de peces de agua dulce, los comerciales o los ornamentales y sumarles a estos disecados o preservados otros organismos marinos importantes, debe estimular la cría de ellos a nivel casero con toda la terapia que esto implica. Pero, además, si vemos o conocemos varias líneas de tilapias  nos animaremos a producirlas comercialmente y a consumirlas.

En el caso de las aves no me iría por las que demandan mucha atención, como las que demandan insectos para su alimentación, los insectívoros o dietas especiales de frutas, semillas, etc. Preferiríamos las colecciones de gallinas, patos, faisanes, palomas, gansos y otras de interés comercial. Por ejemplo de gallina de Guinea o pavos encontramos de cuatro a seis razas, lo que las hace atrayentes. El alimento balanceado aparece fácil y, si no, el maíz.

Sabemos que las avestruces, el casuario o el ñandú son bellas, por eso las vemos en nuestro Zoodom y las mismas necesitan mucho espacio. Sin embargo, otras bellas, como las cacatúas, cotorritas del amor o tucanes que son ornamentales pueden y deben tenerse, a sabiendas de que cuesta mantenerlas, pero si cobramos a los visitantes nacionales o extranjeros debemos generar fondos para su manutención básica. Las aves ornamentales son muy atrayentes.

Otras muestras pueden ser más grandes diversas e interesantes, pues con los animales mayores como los bovinos, porcinos, caprinos, ovinos, caballar, burros e inclusive menores como los conejos y los curies, encontramos una diversidad muy atrayente.

Uno de reptiles que puedan mostrar la diversidad que se tiene de estas especies, sean las culebras, hicoteas, lagartijas, iguanas, entre otras, pueden establecerse en ciertas zonas áridas junto a las exhibiciones de cactaceaes.

Ahora bien, la idea de las especies a mostrar no es limitativa, es solo enunciativa y reitero que ¡Ojala! se animen quienes pueden y deben. Por simple que sea mostrar veinte o treinta, sí, veinte o treinta razas de gallinas es una atracción.

Finalmente y por ahora, creemos que debemos darle preferencia a las especies nativas y con potenciales comerciales.