La ministra de la Mujer, Janet Camilo, condenó hoy de manera enérgica los niveles preocupantes a los que está llegando la violencia de género en el país.

En este sentido, Camilo rechazó la última ola de feminicidios que ha culminado con el vil asesinato y posterior descuartizamiento de una mujer.

“Como mujer, como madre, como ministra me pregunto: ¿En qué clase de sociedad nos estamos convirtiendo¿”, dijo Camilo al tiempo que manifestó su desaprobación a este hecho.

Cifras escalofriantes.-La ministra de la Mujer explicó que los datos más recientes dan cuenta de que cada 48 horas una dominicana muere asesinada, víctima por demás de la violencia de género.

De hecho, datos suministrados por la Policía Nacional indican que de enero a 12 de junio de este año, 43 mujeres han sido víctimas de muertes violentas.

“No podemos seguir amparando estas terroríficas cifras bajo el manto del silencio, un silencio que nos hace cómplices de las humillaciones, de las vejaciones, de los golpes y de los asesinatos”, afirmó Camilo.

Agregó que si se tratara de un virus que matara a la población a ese ritmo, hace muchos años que ya habría una solución porque se habrían dedicado todos los esfuerzos y recursos necesarios, tal y como se debería de hacer con la violencia de género.

Anuncia acciones concretas. Camilo informó que desde el Ministerio de la Mujer se está haciendo un gran esfuerzo, implementando la mesa de la ruta crítica, recorriendo provincia a provincia, y visitando todas las estancias sociales y gubernamentales que pueden incidir en la disminución de la violencia contra las mujeres.

Además, indicó que se están mejorando y aumentando los servicios de atención y prevención. No obstante, la ministra señaló como clave fundamental que la ciudadanía haga causa común frente a la violencia de género.

“Tenemos que pensar que todas y todos somos parte del problema y parte de la solución. La batalla contra la violencia de género la ganaremos luchando juntos hombres y mujeres, o no la ganaremos”, concluyó la ministra de la Mujer.