El ministro de Hacienda, Donald Guerrero, planteó hoy que para combatir la pandemia del coronavirus (COVID-19), proteger el tejido productivo, construir infraestructura de primera necesidad y financiar el Presupuesto General del Estado 2020, es indispensable que el Estado disponga de fondos que le permitan brindar ayuda rápida y efectiva a la población dominicana.
Guerrero dijo que para abordar la crisis generada por el COVID-19 y sus consecuencias, necesariamente «debemos buscar financiamiento, aunque siempre tratando de obtener los términos y costos más ventajosos para el Estado dominicano con relación a las condiciones de mercado vigentes».
En este contexto, aseguró que la colocación de manera directa de títulos valores de deuda pública, por un monto total de RD$40,000.0 millones, a las cuatro administradoras de fondos de pensiones (AFP) con mayor patrimonio del sistema financiero dominicano, no solo permite al Estado obtener recursos frescos para combatir los efectos económicos del COVID-19, sino financiarse a niveles de tasas congruentes con la situación del mercado de deuda previo a que se desarrollara la emergencia.
«Colocamos cuatro series por montos de RD$10,000.0 millones cada una. De estas, tres series tienen vencimiento en 2030, 2035 y en 2040, con cupones de 10.000%, 10.250% y 10.875%, respectivamente. La cuarta serie tiene vencimiento en 2040 con cupón de 10.875% y sus fondos serán destinados a proyectos de infraestructura», explicó el funcionario.
Indicó que la distribución se realizó en partes iguales entre AFP Crecer, AFP Popular, AFP Reservas y AFP Siembra a través de la Dirección General de Crédito Público.
La operación está sustentada en la Ley de Presupuesto General del Estado para el año 2020, No. 509-19, y la Ley de Valores de Deuda Pública para el año 2020, No. 512-19, la cual dispone que las colocaciones directas en el mercado local sean instruidas mediante resolución ministerial.
El titular del órgano rector de las finanzas públicas informó que los recursos serán instrumentales para la reactivación de la economía a medida que esta se vaya reabriendo de manera gradual.
«Estos recursos serán destinados al combate de la pandemia, la protección del tejido productivo y de las cadenas de valor, la construcción de infraestructura de primera necesidad y el financiamiento del Presupuesto General del Estado 2020 mediante el apoyo a los sectores económicos más afectados por la crisis y a aquellos que tienen mayor impacto en la matriz insumo-producto de la economía y que, por tanto, tienen mayor aporte en la generación de empleos y riqueza nacional», precisó.
En adición, señaló que estos fondos sirven para cubrir parte de las necesidades relacionadas con la ampliación de los programas FASE y Quédate en Casa durante el mes de junio, anunciada por el presidente Danilo Medina.
“La incorporación de estos RD$40,000 millones al Presupuesto General de la nación se hará de manera gradual, durante los próximos meses, para evitar presiones inflacionarias, al mismo tiempo que se fortalecen los programas sociales, la inversión en salud pública y el inicio de proyectos de infraestructuras, necesarios para la reactivación económica”, expresó.
La transacción ayuda a anclar los niveles de rendimientos y mejora los indicadores de riesgo del portafolio de deuda del Estado, consideró Guerrero Ortiz. «Por un lado, se mitiga el riesgo de refinanciamiento, al extender la madurez promedio de su deuda doméstica que, en el mes de marzo se encontraba en 6.4 años, mientras que la madurez promedio de los instrumentos colocados en esta operación es de 16.25 años, y, por otro lado, se mitiga el riesgo cambiario y el riesgo de tipo de interés, ya que los instrumentos contratados son en moneda local y a tasa fija», manifestó el ministro de Hacienda.
Informó que las AFP obtuvieron la liquidez para la operación vendiendo al Banco Central de la República Dominicana (BCRD), títulos valores emitidos por el mismo BCRD con vencimientos en plazos más cortos.
Dijo que esto permitió a las AFP manejar el riesgo de reinversión de los fondos de los trabajadores, que es el riesgo de que, una vez venza el activo en cuestión y se reciba su valor en efectivo, no se encuentren activos similarmente atractivos en qué reinvertir esta liquidez, lo que provocaría una disminución de la rentabilidad del fondo y en última instancia, una menor tasa de reemplazo para el cotizante.
Al comprar títulos del Ministerio de Hacienda de largo plazo, las AFP aseguran a los cotizantes no solo una mayor rentabilidad, sino que aplazan el riesgo de reinversión de las series que estaban próximas a vencer hasta 16.25 años en promedio, una operación que ayuda a preservar la tasa de reemplazo que obtendrán los trabajadores una vez se pensionen, señaló el ministro Guerrero Ortiz.