El ministro de Interior y Policía, Ramón Fadul, se reunió hoy con las principales juntas de vecinos de la Zona Colonial, la Asociación Obando y la Academia Dominicana de Genealogía, entre otras entidades, con el propósito de buscar una solución a la situación de ruido que sufre la ciudad más antigua del Nuevo Mundo.

Las entidades, en su mayoría representantes de la Iglesia Católica, se quejaron nuevamente ante Fadul, del constante ruido y los hechos que atentan contra la moral, cometidos por visitantes de los bares del sector.

Los representantes denunciaron que los dueños de bares no tiene el permiso de suelo que otorga el Ayuntamiento del Distrito Nacional (ADN) que permíte la instalación de establecimientos comerciales en casas coloniales.

Recordaron que estas estructuras no pueden ser modificadas para evitar que el ruido salga de los establecimientos, como han hecho algunos propietarios de negocios de la zona.

Explicaron que los vecinos, residentes del sector, han sido víctimas de atropellos, golpizas, ofensas verbales y robo de sus vehículos.

Agregaron que no culpan a ninguna institución de la problemática que tiene sumida en el ruido a las personas que viven cerca de los centros nocturnos, en su mayoría, sino que con la reiterada denuncia, buscan que los ministerios de Interior y Policía (MIP), Turismo, Medio Ambiente, la Autoridad Metropolitana de Transporte (AMET), la Fiscalía del Distrito Nacional y Politur, se comprometan para hacer cumplir las reglas, relativas a la revisión del control del ruido en el sector.