El ministro de Salud, doctor Bautista Rojas Gómez, rehusó ayer referirse a las acusaciones que le hiciera el director de la Pastoral Penitenciaria, Fray Arístidez Ríchardson.
No voy a contestar a esos epítetos, dijo cuando se le preguntó por las acusaciones de mentiroso, mediocre, cobarde y trujillista que le hizo el cura.
El sacerdote insistió en el brote de cólera que afecta a un grupo de reclusos de la cárcel de La Victoria.
Aseguró que 10 presos han muerto por cólera en esa cárcel, pero el ministro asegura que no es cierto.