El ministro de Trabajo, Max Puig, emplazó al presidente de la Confederación Nacional de Unidad Sindical (CNUS), Rafael (Pepe) Abreu,  aportar las pruebas de que el funcionario auspicia la violación a la libertad sindical, lo que ha provocado que 4,000 trabajadores hayan perdido sus empleos  por intentar constituir sindicatos.

“Rechazo estas declaraciones por no tener ningún asidero, por hacerle daño de manera gratuita a la gestión que encabezo y afectar el prestigio de la República Dominicana como país respetuoso de los derechos humanos y garante de los compromisos asumidos internacionalmente”, dijo Puig mediante una comunicación   enviada a Abreu.

“En virtud de lo anterior le solicito formalmente que señale de manera específica dónde se habrían estado produciendo los supuestos despidos y cuáles son los sindicatos a los que se les ha negado el registro”, dijo el ministro de Trabajo.

Declaró que el ministerio que encabeza ha intervenido, en los casos necesarios, en la reposición de empleados en sus puestos de trabajo, cuando con su cancelación se les han violado sus derechos.

A continuación el texto parcial de la comunicación:

“Distinguido señor: desde que fui designado como ministro de Trabajo en agosto de 2008 asumí a plenitud la política de diálogo social a través del espacio natural instituido para tales fines dentro del ministerio, como lo es el Consejo Consultivo del Trabajo, convencido de que este constituye el instrumento por excelencia para garantizar la preservación de la paz laboral.

“Permítame decirle que rechazo estas declaraciones por no tener absolutamente ningún asidero y por afectar el prestigio de la República Dominicana como país respetuoso de los derechos humanos”, dice el ministro Max  Puig en la carta enviada a Rafael Abreu.